El director de un colegio británico de primaria fue condenado por un tribunal de Bristol (oeste de Inglaterra) a dos años y ocho meses de cárcel por filmar a sus alumnos en el baño con un lápiz espía.
El inglés Ashley Yates (45 años) que aceptó seis cargos de voyeurismo y tres más de posesión de imágenes indecentes de menores, grabó a sus alumnos con un bolígrafo con cámara en los baños del colegio de educación primaria Tynings, en el condado de South Gloucestershire.
En total, Yates, casado y con hijos, filmó a nueve menores y a 22 adultos, y en el pasado había confesado a su mujer que era un "monstruo sexual".
El juez británico Michael Longman aceptó que el principal interés de Yates eran los adultos orinando, pero señaló que el director de la escuela "conocía perfectamente" que estaba grabando también a los menores.
El magistrado describió el comportamiento del condenado como "retorcido" y dijo que había "abusado de la confianza" de todos en la escuela.
Uno de los estudiantes del centro encontró el bolígrafo espía escondido en uno de los baños para minusválidos y se lo entregó a un conserje, que denunció al director.