63 años y siete meses. O más exactamente, 23.226 días, 16 horas y 23 minutos.
Éste es el tiempo que el Palacio de Buckingham calcula que la Reina Isabel II de Inglaterra habrá reinado a las 17:30 (hora local, 16:30 GMT) de este miércoles 9 de septiembre.
En ese momento superará a la Reina Victoria como la monarca británica con más tiempo en el trono del Reino Unido de la Gran Bretaña e Irlanda del Norte.
63 años en los que ha visto pasar de todo, desde la recuperación europea tras la Segunda Guerra Mundial hasta la caída del Imperio Británico, pasando por la revolución de los años 60, la caída del muro de Berlín, la llegada de Internet, las guerras de Medio Oriente.
A propósito de este hito, el corresponsal de asuntos monárquicos de la BBC, Nicholas Witchell, analiza lo que su largo reinado ha significado para Reino Unido.
Firme. Constante. Diligente.
Estas son las palabras que se utilizan con más frecuencia para describir a la reina Isabel II, monarca y jefe de Estado del Reino Unido y de sus "otros reinos y territorios".
Pocos, creo yo, estarán en desacuerdo con esta caracterización de una soberana ampliamente respetada cuyo reinado ha entrado en los libros de récords.
Ya es la monarca de más edad en la historia británica. Ese hito se logró el 20 de diciembre de 2007 cuando superó el récord que estableció su tatarabuela, la reina Victoria, cuyo reinado terminó con su muerte en 1901 a la edad de 81 años y 243 días.
Y este 9 de septiembre de 2015, Isabel II supera la duración del reinado de Victoria para convertirse en la monarca que más años ha reinado durante los más de 1.000 años de monarquía en este país.
Es fácil enumerar las estadísticas. Lo difícil es visualizar el Reino Unido de principios de 1952, cuando Isabel accedió al trono, luego de la muerte de su padre, el rey Jorge VI.
Y aún más difícil después de todos estos años imaginar a este país sin una figura que, después de todas las décadas que han pasado, sigue estando en el telón de fondo de la vida de la gran mayoría de sus ciudadanos.
Reino Unido en la postguerra
En 1952, el Reino Unido se ajustaba a las secuelas de la Segunda Guerra Mundial. El legado de ese conflicto penetró todos los ámbitos. Afectó la vida diaria de formas que hoy son difíciles de imaginar.
A principios de los 1950 Reino Unido era un país estrechamente alineado a las actitudes y estilos de vida que habían prevalecido en las primeras décadas del siglo XX.
Era una nación de unos 50 millones de habitantes, con una fuerte distinción y deferencia de clases, donde los asesinos eran condenados a la horca, la conducta homosexual era ilegal y la inmigración masiva no había comenzado.
No había carreteras ni supermercados, y sólo cerca de un millón y medio de hogares tenían un aparato de TV donde podían mirar el único canal rudimentario, en blanco y negro, transmitido por la BBC.
Cuando comenzó el reinado de Isabel, Winston Churchill ocupaba la residencia oficial de Downing Street, Joseph Stalin el Kremlin, y Harry S. Truman la Casa Blanca.
Cada uno de ellos había soportado el liderazgo durante la guerra. Estaban viejos y se acercaban al fin de sus carreras políticas: Churchill estaba cerca de cumplir 80 años.
De pronto, el Reino Unido tenía una joven de sólo 25 años ocupando el trono.
Victoria vs. Isabel II, en números
EN EL TRONO
Victoria ascendió al trono a la edad de 18 años y permaneció en él 63 años, siete meses y dos días.
Isabel II lo hizo a la edad de 25 años y a partir de hoy tiene el nuevo récord en el trono.
FAMILIA
Victoria, quien medía 1,49 metros de estatura, se casó con el príncipe Alberto a la edad de 21 años. Su matrimonio duró 20 años y terminó con la muerte del príncipe. Tuvieron nueve hijos.
Isabel, quien mide 1,62 metros de estatura, se casó con el príncipe de Edimburgo a la edad de 21 años. Han estado casados por 68 años. Tienen cuatro hijos.
REINO
Victoria fue reina de un imperio equivalente a un cuarto del planeta, con 400 millones de habitantes.
Isabel es jefa de Estado de Reino Unido y 15 países de la Mancomunidad, con una población de 139 millones de habitantes.
DINERO
Victoria recibió £385.000 del Parlamento tras ascender al trono, con las que compró Osborne House en la Isla de Wight y el castillo de Balmoral.
Se cree que la fortuna de Isabel es de unos £340 millones.
Vendaval de cambio
Ese trono todavía tenía una presencia internacional importante.
El "imperio británico" seguía siendo una realidad. Entre los "reinos y territorios" de los que Isabel era jefa de Estado, estaba gran parte de África, una región grande de los antiguos "dominios" de Canadá, Australia, Nueva Zelanda y (todavía) Sudáfrica.
Pero la época de Isabel ha estado siempre caracterizada por el cambio. Y no sólo han sido "vientos" los que han barrido a través de los territorios británicos. Ha habido "vendavales" que han impactado cada uno de los aspectos de la vida a través de las décadas de su reinado.
El país de 2015 es muy diferente al Reino Unido de 1952.
La estructura política, todas las actitudes sociales, la composición cultural y la base industrial y económica se han transformado.
La familia real también se ha visto golpeada. La deferencia que se le rendía en los 1950 ha dado pie a una agresiva curiosidad de algunos sectores de los medios de comunicación.
Y ha habido una sucesión de traumas familiares, divorcios y en 1997, la muerte de Diana, la princesa de Gales.
"Ancla permanente"
A través de todos estos altibajos, la reina ha sido una figura "constante", que ha enfrentado a detractores y desafiado a críticos.
Década tras década ha seguido la misma rutina invariable, tan segura y predecible como las estaciones, con estoicismo y sentido del deber.
Tal como declaró el primer ministro David Cameron, la reina ha sido "un ancla permanente, soportando las tormentas y sustentándonos en la certidumbre".
Su nieto, el príncipe Guillermo, ha hablado de su ejemplo de "deber y compasión" y de lo que él llama "su sentido innato de calma y perspectiva".
Y así seguirá. Su retiro es indiscutible. Continuará buscando, como lo dijo en el discurso durante su coronación, ser "merecedora de su confianza".
A pesar de las distintas opiniones sobre los méritos de una monarquía constitucional, creo que habrá pocos que critiquen el ejemplo de esta veterana monarca.