La secretaria de Estado de EE.UU. indicó que "no fueron ni libres ni justas".
El gobierno ruso apuntó que sus palabras "son absolutamente inaceptables".
Rusia tachó de inaceptables las declaraciones de la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, quien dijo que las elecciones parlamentarias rusas del domingo pasado no fueron "ni libres ni justas".
"La
s declaraciones de Clinton (...) son absolutamente inaceptables. Tales conclusiones (sobre fraude electoral) no las hubo ni de cerca en los informes de los observadores internacionales", dijo Konstantín Kosachov, jefe del comité de Relaciones Exteriores de la Duma, citado por la agencia Interfax.
Kosachov añadió: "Esta es una de las páginas más negras en la historia de las relaciones ruso-estadounidenses a lo largo de los últimos años que transcurrieron en el clima del reinicio".
Por su parte, Nikolái Konkin, secretario de la Comisión Electoral Central (CEC) de Rusia, recurrió a la ironía al aconsejarle a Clinton que se dedique a las próximas elecciones en EEUU.
"Mejor que Clinton se centre en sus elecciones", dijo el funcionario ruso.
La misión de observadores internacionales de la OSCE y la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa (PACE) denunció la víspera numerosas irregularidades durante el escrutinio de las elecciones parlamentarias del domingo en Rusia.
"La calidad del proceso electoral se deterioró considerablemente durante el escrutinio, que se caracterizó por frecuentes violaciones de procedimiento y casos de aparente manipulación, incluidos indicios graves de introducción masiva de papeletas en las urnas", señala el informe de los observadores internacionales.
En opinión de Clinton, que participó en la reunión de la OSCE en Lituania, "las elecciones que no son ni libres ni justas" menoscaban la confianza de la ciudadanía en sus instituciones.
