Rusia calificó de unilateral la reunión de los "Amigos de Siria" celebrada el viernes en Túnez y señaló que no ayudó a la resolución del conflicto ni al establecimiento del diálogo entre las fuerzas sirias.
"La reunión de Túnez fue claramente unilateral, allí se escucharon distintas voces y hasta ahora no tenemos claro el estatus del documento aprobado", declaró hoy el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov.
El ministro ruso subrayó que la resolución de la reunión es interpretada de forma diferente por los distintos participantes en el cónclave celebrado en el país magrebí.
"Tenemos la impresión de que esa reunión no ayudó a crear las condiciones necesarias para estimular a los sirios al establecimiento del diálogo político", dijo Lavrov.
"Los Amigos de Siria" aprobaron un documento en el que instaron a una transición política, a exigir cuentas al régimen sirio y a apoyar a la oposición, pero no lograron acordar ninguna medida concreta para detener la violencia o imponer un corredor humanitario.
Lavrov, por otra parte, calificó de "democratizador" el referéndum sobre la reforma constitucional que introducirá un sistema político multipartidista celebrado ayer en Siria.
"Tienen razón aquellos que ven en este (referéndum) un movimiento democratizador. El fin del monopolio de un partido en el sistema político debe ser bienvenido", recalcó el titular de Exteriores.
La nueva Carta Magna incluye como principal cambio la supresión del artículo 8, que estipula que el gobernante partido Baaz, en el poder desde 1963, es "el líder del estado y la sociedad".
Con el nuevo texto, redactado por una comisión de 29 miembros, otros partidos tendrán el derecho a designar a sus candidatos para la Presidencia, que queda limitada a un máximo de dos mandatos de siete años cada uno.