El presidente ruso, Vladímir Putin, defendió la nueva ley sobre las ONG, que obliga a registrarse como "agentes extranjeros" a aquellas organizaciones que reciben financiación desde el exterior y participan en la vida política.
"¿Por qué ellos -EEUU- pueden defenderse de la influencia exterior durante décadas con esa ley y nosotros en Rusia no podemos hacerlo?", señaló Putin al dirigirse a los participantes en el campamento juvenil "Seliger".
Putin, que reconoció que la nueva ley ha causado "rechazo" entre los activistas rusos, aludía a la ley análoga que está en vigor en EEUU desde 1938, aunque el embajador norteamericano y los opositores rusos aducen que ambas legislaciones son diferentes.
"¿Qué hay de malo en que los que reciben financiamiento del exterior y realizan actividades políticas se registren como agente extranjero? Si los extranjeros pagan por actividades políticas en nuestro país, esperan lograr resultados", se preguntó.
El líder ruso aseguró "no ver nada extraño" en la noción "agente extranjero" y recordó que ese concepto existe en muchos otros ámbitos y, al respecto, recordó los tiempos en que trabajó en el KGB soviético, según informan las agencias locales.
Además, explicó que él mismo pidió a los diputados que introdujeran enmiendas a la ley para que no tuvieran que registrarse como "agente extranjero" aquellas ONG que participan en los ámbitos científico, cultural, educativo y humanitario.
|
Putin aseguró que EEUU también tiene una ley que los protege de la "influencia exterior". (Foto: EFE)
|
Quienes no se registren podrán ser multados o condenados a prisión
Según la ley, políticamente activas son las ONG que independientemente de sus fines declarados financien u organicen acciones políticas que persigan influir en la toma de decisiones de instituciones estatales" y participen en la formación de la opinión pública.
Las ONG afectadas deberán rendir cuentas a través de una auditoría contable anual y presentar informes semestrales sobre su actividad. Para cumplir este trámite, las ONG rusas tendrán un plazo de 120 días tras la entrada en vigor de la ley.
Los responsables de las organizaciones que se nieguen a presentar la documentación para ser incorporadas al registro podrán ser sancionados con multas de hasta 300.000 rublos (9.200 dólares), 480 horas de trabajos comunitarios e, incluso, penas de prisión de hasta dos años.