"Ha permanecido bajo nuestra soberanía a lo largo de varios siglos", justificó el presidente de Rusia.
"Hablar que aquella región debe pasar bajo control de alguien más es una completa tontería", agregó.
El presidente ruso se cerró a la idea que el Ártico pase a control internacional.
El presidente ruso, Vladimir Putin, insistió en que el Ártico es parte "inalienable" de la Federación Rusa, por lo que ese territorio no puede ser cedido bajo control internacional.
"El Ártico es una parte inalienable de Rusia que ha permanecido bajo nuestra soberanía a lo largo de varios siglos. Así será siempre", aseguró el líder ruso en una reunión con representantes del partido oficialista Rusia Unida.
Al ser consultado por su opinión acerca de la iniciativa de un experto de que el Ártico pase bajo control internacional, Putin llamó "imbécil" a su autor.
Apuntó al respecto que varios submarinos estadounidenses están de guardia cerca de las costas de Noruega y que llevan a bordo misiles cuyo tiempo de aproximación a Moscú desde aquella región sería "de 16 a 17 minutos".
"Hablar en estas condiciones de que aquella región (el Ártico) debe pasar bajo control de alguien más es una completa tontería. Es una postura contra el pueblo (ruso) por no decir antipatriota", aseveró.
Bajo protección militar
Putin subrayó que el Ártico está bajo la protección militar de la Flota del Norte de Rusia y recordó que cerca de allí está desplegada una base de submarinos estratégicos rusos.
"La segunda base de submarinos atómicos estratégicos está en la parte oriental, también muy cerca del Norte. Aunque patrullan otras regiones, pertenecen a la parte norte" y aseguró que Rusia continuará "la senda de la ampliación de nuestra presencia en el Ártico".
Rusia mantiene que es la mayor potencia ártica, ya que tiene el mayor número de kilómetros de costa que dan a esas aguas y la mayor ruta por el Océano Glacial Ártico.
