El arzobispo de León, José Guadalupe Martín Rábago, llamó a los feligreses a no tener miedo y salir a recibir a Benedicto XVI en su viaje a México, de 23 al 26 de este mes, y descartó que la ciudad se paralice durante la estancia del Papa.
"No se van a cerrar los comercios, solamente se van a cerrar ciertas vialidades en momentos previos al paso del Papa, pero no se va a paralizar la ciudad, la vida de la ciudad sigue", aseguró Rábago, en una rueda de prensa este viernes, previa a la llegada del Pontífice.
El prelado minimizó la aparición de mensajes del crimen organizado en los que se hace una alusión a una "tregua" con motivo de la visita papal, donde señaló que "no tienen ninguna importancia" y por tanto él prefiere ignorarlos.
Agregó que el Estado Mayor Presidencial es quien sabe "lo que puede haber de verdad y lo que puede haber simplemente de publicidad de parte de estos grupos".
"Estoy consciente de que tenemos el apoyo de quienes son responsables de guardar la seguridad del Papa y bajo ese sentido les diría a todos, a la gente que va a salir a la calle, a los muchachos que van a estar en las vallas: no tengan miedo, estén tranquilos", dijo.
Rábago también reiteró que la visita no tiene fines electorales, no obstante que su llegada coincide con los procesos pre-electorales que vive el país y el estado de Guanajuato
"No podía nadie movilizar a un Papa para venir a apoyar a un partido político en un estado, esa es la realidad", señaló y enfatizó en que la intención de Benedicto XVI no es apoyar a partido político alguno, sino predicar el mensaje de Cristo.