El Pontífice, además, señaló que espera que en la región se puedan definir, cuanto antes, la recíproca relación con la Iglesia, lo que, a su juicio, será beneficioso para la sociedad.
Benedicto XVI auspició este sábado que en América Latina se pueda "cuanto antes definir las recíprocas relaciones con la Iglesia fundadas en los principios de autonomía y sana colaboración".
El Papa hizo estas afirmaciones a tres meses de la apertura de la V Conferencia del Consejo Episcopal Latinoamericano (Celam), que se inaugurará en Aparecida, Brasil, al recibir a los nuncios que trabajan en América Latina.
"Espero que en los países latinoamericanos, donde las cartas constitucionales se limitan a conceder libertad de credo y de culto pero no reconocen aún la libertad religiosa, se puedan cuanto antes definir las recíprocas relaciones con la Iglesia fundadas en los principios de autonomía y sana colaboración", dijo el pontífice.
"Ello permitirá a la comunidad eclesiástica desarrollar su potencial en beneficio de la sociedad y de toda persona creada a imagen de Dios", añadió.
"Una correcta formulación jurídica no podrá no tener en cuenta el papel histórico y espiritual y cultural y social desempeñado por la Iglesia en América Latina", dijo el Papa.
El pontífice precisó a continuación que "la Iglesia, señal e instrumento, se encuentra en sintonía con toda legítima aspiración de los pueblos a una mayor armonía y cooperación". (Agencias)
