El papa Francisco llamó por teléfono a Benedicto XVI para felicitarle en su 86 cumpleaños, a la vez que dedicó la misa de esta jornada al papa emérito, informó el Vaticano.
"Hoy es el cumpleaños de Benedicto XVI. Ofrezcamos la misa de hoy por él, para que el Señor este con él, le conforte y le de mucho consuelo", afirmó Francisco al inicio de la misa que ofició, como todas las mañanas, en la capilla de la residencia de Santa Marta, del Vaticano, donde se aloja, y a la que asistieron el cardenal Giuseppe Bertello, presidente de la Gobernación del Vaticano y el patriarca latino de Jerusalén, Fuad Twal, entre otros.
Durante la mañana, el papa Francisco llamó por teléfono al papa emérito Ratzinger a la residencia de Castel Gandolfo, para felicitarle personalmente.
Francisco también aprovechó para felicitar al hermano mayor del obispo emérito de Roma, el también sacerdote Georg, de 89 años, que está desde hace varios días en Castel Gandolfo y que el próximo 23 de abril festejará su onomástica (san Jorge).
"Oculto para el mundo", como él mismo dijo cuando anunció su renuncia, Benedicto XVI festejó hoy su 86 cumpleaños en la intimidad y de manera "familiar", según precisó el Vaticano, acompañado de su hermano Georg; su secretario Georg Ganswein (que es también Prefecto de la Casa Pontificia) y las cuatro laicas consagradas de la comunidad "Memores Domini" que le cuidan.
La jornada fue, según fuentes vaticanas, tranquila, en la misma línea que la de otros días, repartida entre momentos de plegarias, de lectura, música, acompañado de su hermano Georg, el único miembro directo de su familia que aún vive y que siempre se ha preocupado del "pequeño de la familia", el papa emérito, cuya salud siempre le ha preocupado.