El papa Francisco y la presidenta de Argentina, Cristina Fernández, mantuvieron un encuentro a solas que se prolongó unos 20 minutos, informó el portavoz vaticano, Federico Lombardi.
Tras la reunión, el pontífice y la mandataria fueron a almorzar a la residencia Santa Marta, donde se está alojando Francisco a la espera de que esté preparado el apartamento papal en el palacio apostólico.
Tras el encuentro a solas, el papa saludó al séquito que acompañaba a Fernández, su compatriota y la primera jefa de Estado que recibe el pontifice desde su elección.
Lombardi calificó el encuentro como un "gesto de cortesía y afecto" hacia la jefa de Estado y al pueblo argentino, subrayando que no se trató de una visita formal o de Estado, sino un gesto de cortesía y cariño hacia su tierra.
El encuentro se produjo, no obstante, en medio de una alta expectación periodística debido a las conocidas discrepancias públicas que tuvo en los útimos años el arzobispo de Buenos Aires con Néstor Kirchner y Cristina Fernández, sobre todo tras la aprobación de las leyes sobre el aborto y el matrimonio homosexual.
La última audiencia en privado entre Fernández de Kirchner y Bergoglio tuvo lugar en 2010. Cristina Fernández asistirá mañana a la misa de inicio del pontificado, a la que se espera acudan 150 delegaciones de países, incluida la chilena, que encabeza el Presidente Sebastián Piñera.