El vaticanista Jesús Bastante aseguró que el papa Francisco decidió dejar de contar con George Pell y el chileno Francisco Javier Errázuriz, dos de los cardenales que están participando en la reforma de la curia romana implicados, de una u otra manera, en casos de abusos sexuales.
Ambos religiosos serán expulsados en septiembre del C9, comisión formada por un grupo de colaboradores directos y cercanos, que asesoran al pontífice en la redacción de una nueva Constitución apostólica.
Bastante, vaticanista con vasta experiencia y diversas publicaciones relacionadas a la iglesia, entregó este dato en eldiario.es y conversó con Cooperativa sobre esta información.
El profesional afirmó que "esa salida se hará efectiva en septiembre. Del 11 al 13 de septiembre hay una reunión y en esa reunión se tomará una serie de decisiones, entre ellas la entrada de varios canonistas, porque ahora comienza la parte final del proceso de reforma de la curia y eso llevaría la salida de algunos miembros, entre ellos el cardenal Pell y Errázuriz".
"En el caso de Errázuriz está muy presente en la lucha del papa contra los abusos y una cierta desconfianza respecto a su actuación. Como bien le señalaron las víctimas en su encuentro con el papa que ellas consideran a Errázuriz como uno de los grandes silenciadores de su problemática. La duda es si Errázuriz acudirá a esta reunión de septiembre o ya no estará en la misma", prosiguió.
"No tengo ninguna noticia"
En declaraciones a La Segunda, el arzobispo emérito aseguró que hasta ahora no ha "recibido ninguna comunicación ni del Santo Padre, ni del Vaticano" respecto de su supuesta salida del Consejo.
Errázuriz recordó que fue el papa quien "instituyó el Consejo para que sea un Consejo permanente", pero "evidentemente el Consejo es permanente, no (así) los consejeros".
"No tengo ninguna noticia sobre la fecha de los cambios que un día el papa va a hacer", insistió el prelado.
Iglesia Católica chilena no se ha referido al tema
La Iglesia Católica chilena no ha querido referirse a este tema, ya que es un trascendido y aún no existe información oficial.
Desde el Gobierno, la ministra vocera, Cecilia Pérez, apuntó que "la iglesia chilena es autónoma para establecer sus propios protocolos y sus propias representaciones y de eso no nos vamos a referir".
"Pero en términos del fondo, nosotros confiamos en las decisiones que ha tomado y que sigue tomando el papa, creemos que son positivas, sobre todo para que la iglesia católica vuelva a recuperar la confianza y el respeto de todo Chile", añadió la secretaria de Estado.
