Barricadas, neumáticos ardiendo y muchos jóvenes fuertemente armados en las calles son la característica de la jornada de "paro popular y revolucionario contra la represión y persecución política" que se realiza en Caracas, contra una investigación policial sobre un atentado.
Supuestos grupos al Gobierno de Hugo Chávez coparon la zona oeste de la capital, principalmente el populoso barrio 23 de Enero, en demanda del fin del trabajo policial y judicial sobre el atentado explosivo que el 24 de febrero afectó a la sede del gremio patronal Fedecamaras, en el que murió el activista que colocó la bomba.
En abril de 2002, el entonces presidente de Fedecamaras, Pedro Carmona, lideró el golpe de Estado que sacó del poder por algunas horas a Chávez.
Un comunicado distribuido en la zona y firmado por una veintena de organizaciones caraqueñas pidió "honor y gloria" pata el fallecido, identificado como Héctor Serrano.
De igual forma, se explicó que el "paro popular y revolucionario" rechaza la investigación policial contra Juan Montoya, otro dirigente barrial supuestamente involucrado en el mismo atentado.
También se critica el tratamiento de la prensa del hecho, principalmente de los medios más tradicionales, parte de la "derecha endógena del proceso revolucionario".
La manifestación no ha sido enfrentada por la policía, y se estima que terminará pasado el mediodía. (EFE)