Las manifestaciones tienen recorridos distintos para evitar conflictos.
Para las actividades se prohibió el uso de armas y el consumo de alcohol.
Simpatizantes y opositores al presidente venezolano, Hugo Chávez, marcharán este sábado por Caracas para expresar su apoyo o rechazo a la nueva Ley Orgánica de Educación, aprobada por el Parlamento el pasado 14 de agosto.
Las marchas, autorizadas oficialmente, no se cruzan en ningún punto de sus recorridos y culminarán en lugares separados por aproximadamente un kilómetro, lo que disipa en principio la posibilidad de que se registren incidentes entre sus integrantes.
El ministro de Interior, Tarek El Aissami, recordó el viernes que estará prohibido portar armas y la venta de bebidas alcohólicas, así como la utilización de vehículos en la cabecera de las marchas.
La nueva ley de Educación no ha escapado a la polarización que caracteriza a la sociedad venezolana y mientras los seguidores de Chávez la apoyan con entusiasmo, los opositores la rechazan de manera vehemente.
Una de las acusaciones contra la nueva legislación es que esta pretende "ideologizar" a los jóvenes, algo que el ministro de Educación, Héctor Navarro, admitió porque, según dijo, todos los programas educativos "ideologizan", incluido el vigente hasta ahora en Venezuela.
Para sus defensores, en cambio, la ley elimina privilegios de clase, abre las puertas de la educación a los sectores tradicionalmente marginados y es una herramienta de justicia social.
