El magistrado que ordenó la detención del clan Pinochet expresó que en una sociedad con Estado de Derecho la defensa de los imputados también debe limitarse a la "ética".
El juez Carlos Cerda, quien determinó la detención de la viuda del dictador Augusto Pinochet y todos sus hijos, exigió que cuando se le critique sea en base a argumentos y no con ataques.
"Es propio que cuando uno emite decisiones que tienen trascendencia de tipo político coyuntural, es normal que haya una reacción adversa, absolutamente entendible, pero debe ser argumentativa y no descalificadora, porque eso daña a la sociedad", manifestó.
En conversación telefónica desde Washington -donde este miércoles recibió el premio de la Fundación Gruber por su aporte a la lucha por los DD.HH.- con Lo que Queda del Día, el magistrado agregó que "no le hace bien a la sociedad chilena que se confunda los argumentos con los ataques".
El juez Cerda, sin referirse de forma explícita a la defensa de la familia Pinochet y a quienes lo han acusado de parcialidad, lamentó que muchas de las críticas estén basadas en "móviles inaceptables y que deben ser descartados de una democracia en un Estado de Derecho", exigió el juez.
Revuelo periodístico "casi" lo superó
Carlos Cerda, quien manifestó que con su trabajo y el de todos los jueces, se contribuye a la paz en Chile, se mostró sorprendido con el revuelo periodístico que provocó su resolución y el premio recibido en Estados Unidos por su lucha a favor de los derechos humanos.
"Estos eventos casi me han superado", dijo el magistrado. (Cooperativa.cl)
