La Justicia fijó para el 4 de julio la apertura del testamento original del dictador Augusto Pinochet, en el marco de la investigación sobre el origen de su fortuna en el caso Riggs.
Según fuentes judiciales, la resolución fue dictada por la jueza Soledad Araneda, en la que será la segunda audiencia de este tipo que se realiza a petición del Consejo de Defensa del Estado (CDE), que es parte querellante en el proceso.
El presidente del CDE, Sergio Urrejola, aclaró que la intención de la operación es "que se tramite la posesión efectiva y si existen bienes, que se paguen los impuestos correspondientes".
El pasado 25 de abril al ser abierto el último testamento que Augusto Pinochet elaboró en 2005, solo se develó un cambio de albacea, según lo confirmó en la oportunidad el abogado del CDE Alvaro Quintanilla, donde Oscar Aitken renunciaba a tal función y la asumía Julia Hormazábal.
Ahora la justicia accederá el próximo 4 de julio al primer testamento escrito por el dictador en 2000, en el que se supone distribuyó su fortuna entre algunos miembros de su familia y cuyo origen es investigado en el caso Riggs.
Por esta razón, varios abogados han solicitado revelar el testamento para conocer a los herederos y así continuar con las acciones penales y civiles debido al origen desconocido de la fortuna de Pinochet.
Sin embargo, para la querellante Carmen Hertz, existen pocas expectativas ante el futuro de la investigación, ya que a su juicio "lo que Pinochet le robó al país no se va a encontrar, ni vamos probablemente a conocer nunca el origen de este enriquecimiento y servirá lo que hay ahí para resarcir en una parte muy mínima el daño fiscal que provocó el dictador".
El caso Este caso se abrió a mediados de 2004 cuando se descubrió que Pinochet mantenía numerosas cuentas secretas en el Riggs Bank de Estados Unidos y otras entidades financieras del exterior.
Los bienes, entre los que se cuentan propiedades inmuebles y vehículos, están actualmente embargados por la Justicia, lo mismo que 2,6 millones de dólares depositados en el Banco de Chile y otros documentos de un banco estadounidense.
Las propiedades de Pinochet incluyen casas en el barrio santiaguino de Lo Barnechea, una parcela en Quintero, una casa en las afueras de Santiago, la finca "Los Boldos", donde están depositadas sus cenizas y departamentos en Reñaca, Iquique, Valparaíso y Santiago y tres automóviles.
La investigación judicial determinó que la fortuna de Pinochet supera los 26 millones de dólares, de los que sólo dos millones tienen una justificación contable.
Al fallecer, en diciembre de 2006, Pinochet estaba procesado por fraude al Fisco y uso de pasaportes falsos y desaforado (paso previo al procesamiento) por malversación de caudales públicos.