Según un estudio de la Universidad Católica, el Gran Santiago es el lugar que concentra la mayor comercialización de marcas ilícitas.
La evasión tributaria de estos productos alcanza a los 500 millones de dólares anuales.
Las marcas más consumidas son Carnival y Fox.
Un estudio realizado por el Centro de Medición de la Pontificia Universidad Católica de Chile, reveló que los segmentos D y E de la población chilena consumen más cigarrillos ilegales que el estrato social más alto.
La investigación mostró que el 61 por ciento más vulnerable de la población, perteneciente a los grupos al D y E, consumen marcas que evaden impuestos; cifra que llega a 35% en sectores más pudientes.
En el total de la población, los fumadores consumen al día 9,6 cigarrillos ilegales y 7,1 legales.
Según la universidad, esto demuestra que la "política pública de poner un impuesto adicional al tabaco para subir su precio y desincentivar el consumo no es efectiva si (en paralelo) existe oferta de cigarrillos de contrabando".
El estudio además estimó que el Fisco deja de percibir alrededor de 500 millones de pesos por evasión tributaria respecto a la venta de estos cigarrillos.
El Centro de Medición UC indicó que el 38,6 por ciento de la población adulta urbana se declara fumadora diaria, y 16,7 por ciento lo hace con una marca adquirida de manera ilícita.
El Gran Santiago concentra el mayor porcentaje de fumadores diarios ilícitos, con 62,6 por ciento, seguido por la zona Norte (23,6), zona Centro Costa (7,6), Centro (4,8) y Sur (1,3 por ciento).
La marca con mayor consumo en la región es Carnival con 37%, seguida por Fox, con 28 por ciento. Sus cajetillas, explican los consumidores, no superan los mil pesos y son adquiridas en ferias y almacenes de barrio.
