Dirigentes sindicales y ejecutivos de la empresa negocian el fin del movimiento.
Algunos pasajeros solidarizaron con los manifestantes y compraron pasajes en otras líneas.
El Terminal Alameda se mantiene cerrado a causa de la huelga legal de los trabajadores de Tur Bus, que exigen un cinco por ciento de reajuste en sus salarios más un 1,37 más en las ventas de pasajes de oficinas. Un centenar de funcionarios protestan fuera del lugar con pancartas y vuvuzelas, que fue cerrado por orden de la empresa para evitar que ingresen.
A esta hora los dirigentes sindicales negocian con los gerentes de la compañía para llegar a un acuerdo que permita volver a operar con normalidad el rodoviario y los viajes de Tur Bus, que se han visto alterados por las movilizaciones iniciadas hace tres días.
Mario Palma, vocero de los manifestantes en medio de la protesta, expresó que "hemos tenido acercamientos con la empresa, pero hasta el momento su respuesta ha sido insatisfactoria para los trabajadores. Estamos en conversaciones. Esperamos seguir avanzando, pero nuestros socios van a seguir movilizados hasta encontrar una solución".
Los viajes que salían y llegaban al Terminal Alameda fueron cambiados al Terminal Santiago. Algunos pasajeros fueron derivados a la empresa Jet Bus e incluso hubo quienes, en solidaridad con los choferes, eligieron comprar pasajes en otras líneas.
