Personal de la DINA calificaba al recinto como un "campo de entrenamiento".
El financiamiento salía de la extracción de diversos minerales como oro y titanio.
Pinochet y Manuel Contreras visitaban la Colonia en diversas ocasiones.
Miles de documentos diplomáticos desclasificados por la Cancillería de Alemania arrojan nuevas luces sobre la estrecha colaboración de Colonia Dignidad y la DINA.
De acuerdo a BBC Mundo, de los documentos se desprende que "Colonia Dignidad era 'un Estado dentro de otro Estado', una fortaleza inexpugnable, hermética, pero con más fuerza e influjo hacia afuera de lo que se creía, lo que le permitió operar con impunidad durante mucho tiempo".
Cerca de 300 alemanas y 20 huérfanos chilenos vivían en la comunidad, bajo reglas como: Dios, esfuerzo y disciplina, y que las "almas rebeldes o difíciles" eran sometidas a tratamientos con sicofármacos y electroshock.
Junto a esto, los ingresos económicos de los integrantes de la comunidad eran retenidos por los líderes, al igual que sus documentos, para evitar que huyeran hacia otro país.
"Todo es eliminado [...] y guardado en la oficina de la Colonia bajo llave", aseguró un ciudadano alemán que se escapó desde el recinto.
Colaboración con la DINA
"Tengo conocimiento que desde 1973 Manuel Contreras, incluso con su mujer, a menudo era un invitado en el fundo", aseguraba una ex colona.
Otro de los habitantes de la Colonia ratifica que "ha trabajado [...] estrechamente con el gobierno. Pinochet ha volado en helicóptero al complejo; la Sra. Pinochet ha participado en la inauguración de la escuela".
De acuerdo a otro de estos documentos, un ex agente de la DINA describió al lugar como "un campo de entrenamiento, dirigido por alemanes, del Servicio Secreto Nacional, en el que permanecen internados numerosos presos políticos [habla de 112 en ese momento], siendo la estación de radio allí instalada la Central de Recepción de la Red de Información del extranjero que posee la DINA".
En relación a la participación de la directiva de Colonia Dignidad en la masacre de Cerro Gallo en 1975, un ex soldado indicó que "fuimos allí a perseguir a unos extremistas y los alemanes nos ayudaron (...) Conocían una montaña, el Cerro Gallo, donde decían que habían visto a extremistas. Pero no usamos nuestros vehículos. Sólo los de ellos (...) Ellos iban uniformados como militares con vestimenta alemana".
"Dormimos en la Colonia. Como nos dijeron que había numerosos extremistas, habían venido refuerzos militares de Chillán, Talca, Curicó y un grupo de infantería de Santiago. Éramos unos 70 (...) Vi que había un helicóptero y pequeños aviones en la Colonia (...) Esa Colonia es una fortaleza", destacó.
"Allí estaban ambos jefes, mi capitán y el líder de ellos (Paul Schäfer). Los alemanes conocían el cerro, sin ellos no hubiéramos logrado nada. Ellos eran los primeros, todo lo sabían (...) Algunos de ellos andaban de civil, tipo la policía secreta", recoge el texto.
Financiamiento de la Colonia
Entre los archivos desclasificados también se revelan detalles sobre los "cuantiosos" recursos económicos de la organización liderada por Paul Schäfer.
"Su carácter social y su trabajo social son fachadas de la empresa. En realidad se trata de una muy potente firma comercial que suministra productos a dos supermercados y en cuya operación probablemente haya también minas de oro y extracción de titanio", sostiene el documento.
"Hasta hace pocos años Colonia Dignidad extraía en el área de Temuco (Nuevo Imperial) también oro. Allí se encontraron cantidades significativas en la cuenca seca del río. Esa fuente, sin embargo, se ha agotado", precisan.
