La Presidenta Michelle Bachelet aludió a su condición directa de víctimas de la dictadura al perder a su padre, el general Alberto Bachelet, para asegurar que no permitirá que se ponga en duda la verdad histórica de las violaciones a los derechos humanos cometidas en dictadura a raíz de los tres nuevos casos falsos que salieron a la luz.
"Tanto como mujer que sufrió en carne propia este dolor, pero a la vez como Presidenta de la República, no voy a aceptar el aprovechamiento ni mucho menos que se juegue con el sufrimiento de muchas familias que aún esperan verdad y justicia", afirmó.
La Mandataria declaró que "no se pueden confundir las cosas, la violación a los derechos humanos es una vergüenza nacional que ha quedado grabada para siempre en la historia de nuestro país y no vamos a permitir que se ponga en duda esa verdad histórica".
Además, pidió a las fuerzas políticas que no manipulen ni intenten sacar pequeñas ventajas con el tema.
Los casos de detenidos desaparecidos falsos fueron abordados en el consejo de gabinete de este lunes, y según el ministro vocero de Gobierno, Francisco Vidal, sólo quedó pendiente si Bachelet le dará urgencia al proyecto de ley que crea el Instituto de Derechos Humanos y reabrirá las comisiones del Informe Rettig y Valech.
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| La Presidenta encabezó el Consejo de Gabinete de este lunes. (Foto: Presidencia) |
Rosende: Lo grave son las violaciones a los derechos humanos
El subsecretario del Interior, Patricio Rosende, declaró con respecto a los casos de detenidos desaparecidos falsos que lo realmente grave son las violaciones a los derechos humanos, pidiendo responsabilidad en las acusaciones y aclarando que los antecedentes llevaban a pensar que ellos eran víctimas de la dictadura y así lo creían sus familiares.
"Lo grave fueron las violaciones a los derechos humanos, lo grave es la permanente obstaculización en la investigación, lo grave es que todavía no sabemos dónde está el paradero de miles de personas que sufrieron y desaparecieron", declaró la autoridad a Una Nueva Mañana.
Rosende explicó que la precariedad de información que existió en la época, gracias a las labores que organismos del régimen militar desplegaron para ocultar la verdad y para evitar la colaboración al máximo hicieron que se consideraran antecedentes erróneos.
"Yo no hablaría de falsos detenidos, lo que ha ocurrido aquí es que las comisiones, con los antecedentes que pudieron reunir de la época se hicieron convicción respecto de las tres situaciones", afirmó anunciando que de acuerdo a esto era "lógico y razonable" pensar que se trata de casos de violaciones a los derechos humanos.
"Pero las familias de estas personas tenían la convicción de que sus familiares habían desaparecido producto de la violencia política de la época", aclaró
Al respecto, Rosende señaló que las averiguaciones que llevaron a cabo posteriormente dieron cuenta que las desapariciones de los tres casos tuvieron causas distintas a lo que las comisiones presumieron "y eso es lo que queremos investigar a través de un ministro en visita y a través de las investigaciones que le vamos a pedir al Consejo de Defensa del Estado".
Además, pidió responsabilidad a la hora de hacer denuncias, luego de que la diputada RN, Karla Rubilar, anunciara que existen ocho casos falsos, aunque sólo dio el nombre de uno, identificado como Juan Manuel Bartoló, quien no aparece registrado como víctima.
"Hemos insistido muchísimo en que estas denuncias, estas informaciones tienen que hacerse con cuidado, con responsabilidad, para cuidar no sólo la verdad histórica, sino la dignidad de quienes sufrieron los vejámenes de la dictadura durante muchos años (...) No se trata de hacer denuncias al voleo, sin fuentes confiables, sin información consolidada", declaró.