Este miércoles se abrió al público la renovada Escotilla 8, la puerta del Estadio Nacional por donde los prisioneros políticos eran conducidos al interior del campo de detención que la dictadura cívico militar instaló entre el 11 de septiembre al 9 de noviembre de 1973.
Cerca de 20.000 personas, entre hombres, mujeres, niños y extranjeros, pasaron por las instalaciones del reducto.
El coliseo cuenta con ocho escotillas, todas utilizadas como celdas colectivas, albergando cada una entre 300 a 500 detenidos. La octava escotilla es un lugar simbólico, ya que desde ahí los detenidos podían ver y reconocer a sus familiares que esperaban en Avenida Grecia noticias de sus seres queridos.
La Escotilla 8 había permanecido cerrada desde abril de este año, debido a los trabajos de recuperación y puesta en valor de los grabados y marcas que hay en sus muros -mensajes, calendarios, fechas e iniciales-, los cuales fueron realizados por los ex prisioneros, con llaves, alambres, vidrios y otros elementos que encontraban en la misma escotilla y sus inmediaciones..
Además, en la actividad de este miércoles, se presentó una exposición fotográfica con retratos de los ex detenidos, que quedará de forma permanente en este sitio de memoria.
Wally Kunstmann, presidenta de la Corporación Estadio Nacional Memoria Nacional Ex Prisioneros Políticos, explicó que "la razón por la que nosotros, los ex prisioneros, hemos continuado en este trabajo es porque hemos decidido que nuestras experiencias sean el legado para las nuevas generaciones, que sepan lo que aconteció en este sitio y en otros sitios de memoria a nivel nacional".
Por su parte, la ministra de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Consuelo Valdés, agregó que "nosotros hicimos un aporte importante dentro de la Unidad de Memoria y Derechos Humanos. Este es un sentido de recuperación y de rehabilitación ética".
"Es el trabajo de todos, no solamente de la autoridad, de Gobierno, de toda la comunidad, de todos lo que puedan participar para que en este país no vuelva a suceder lo que sucedió", añadió.
Liliana Salazar Arredondo, hija de un prisionero que fue asesinado en el Estadio Nacional, fue una de los presentes. "No sé si mi padre estuvo en este camarín, pero lo mataron acá", dijo en la actividad.
"No es sólo recordarlo, sino que también hacer Justicia, y la Justicia no ha llegado. Esto es emocionante, es bonito, pero no es suficiente", expresó la mujer.
Dentro del Estadio Nacional hay 10 sitios para revisar por el Circuito de la Memoria. Para visitarlos, las reservas deben realizarse al correo estadomemorianacional@gmail.com.
La recuperación y puesta en valor de la Escotilla 8 es un proyecto de la Corporación Estadio Nacional Memoria Nacional Ex Prisioneros Políticos, diseñado por los arquitectos Marcel Coloma y Alexandra Buzhynskaya, y financiado por el Fondo del Patrimonio del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, con aportes del Instituto Nacional de Deportes.