El director ejecutivo del Instituto Libertad y Desarrollo, Luis Larraín, comparó la amnistía propuesta en el acuerdo de paz firmado entre el Gobierno de Colombia y las FARC con la situación que viven algunos militares detenidos en Chile por crímenes contra los derechos humanos cometidos durante la dictadura.
Durante su intervención en El Primer Café, Larraín sostuvo que "topamos con el tema que hemos vivido acá en Chile también, el tema de la justicia en la medida de lo posible. Allá se le bautizó con un término más académico, se habla de la justicia transicional como una categoría de justicia".
"Organismos independientes, pero dedicados al tema de los derechos humanos, como Human Rights Watch, declararon que algunas de las disposiciones de esta justicia transicional eran incompatibles con la defensa de los derechos humanos porque hay en ese instrumento que se rechazó temas como amnistía para delitos contra los derechos humanos", añadió.
Larraín criticó que "no puedes tener la severidad y la ferocidad en la defensa de la justicia por los actos de atropello a los derechos humanos que se han cometido en nuestro país y, al mismo tiempo, una suerte de lenidad o frivolidad respecto a lo que ocurrió en Colombia, porque son las FARC".
"Si es de verdad que necesitamos justicias transicionales es porque eso es una realidad de lo que ocurre en los países y yo lo único que pido es que tengamos varas similares para medir una cosa y la otra", remarcó.
Zapata: Tendría cuidado con los paralelos
A su vez, el abogado constitucionalista Patricio Zapata comentó que "yo tendría cuidado con los paralelos. Lo que tuvimos en Chile no fue una guerra civil, tuvimos un estado terrorista de punta a cabo".
"Hay una diferencia enorme entre los hechos que ocurrieron en Colombia, en algunos momentos con la policía colombiana, con el mirar para el lado de algunas autoridades colombianas, con el hecho que tuvimos en Chile a un Presidente de la República que organizó y orquestó actos terroristas dentro y fuera del país", añadió Zapata en el mismo espacio.
"Lo que hubo en Chile fue una masacre, no fue una guerra civil", comentó Patricio Zapata. (Foto: Radio Cooperativa)
El académico destacó que "lo que hubo en Chile fue una masacre, no fue una guerra civil. Cada realidad tiene su propio elemento y yo no usaría las dificultades que enfrentan países como Sudáfrica o como Colombia para salir de una situación de enfrentamiento que puede ser terrible, para ser indulgente en Chile con las cosas que hizo la DINA, Pinochet o la CNI".
"Ojo con esto de pedir coherencias porque una cosa muy distinta es que tú reconozcas que a veces no puedes hacer todo lo que puedes hacer, porque tienes a Pinochet como comandante en jefe, pero tú haces todo lo posible, y otra cosa muy distinta es justificar, por ejemplo, una amnistía como la que tuvimos en Chile, que no tiene nada que ver con una amnistía como la que pueda aprobar el Parlamento democrático de Colombia", concluyó.
Larraín pide "mismo espíritu para analizar"
Como réplica, Larraín añadió que "uno tiene que tener el mismo espíritu para analizar las cosas y creo que no lo están teniendo quienes son tan enfáticos en relación a ningún atisbo de perdón para quienes cometieron violaciones a los derechos humanos en Chile y ver como la cosa más natural del mundo o casi como una suerte de mandato lógico que lo mismo ocurra en Colombia".
"En definitiva, uno advierte en muchas personas que dan opiniones respecto al tema una asimetría absoluta en cuanto a la consideración que tiene que haber en temas como, por ejemplo, una justicia transicional y lo vemos en Chile respecto a la situación de algunos militares que están detenidos", agregó.
El ex presidente de Cruzados SADP concluyó que "personas con auténtica mirada humanitaria están intentando que, por razones humanitarias, haya ciertas medidas y, sin embargo, enfrentan un rechazo muy importante de los mismos que celebraban el acuerdo de Colombia como algo realmente bueno y que aceptan que haya amnistía. A mí lo que me molesta es la distinta vara para medir las cosas".
Ernesto Ottone: Hay una "diferencia muy grande"
Finalmente, el académico Ernesto Ottone comentó que "hay una diferencia muy grande. Colombia fue un país donde nunca el Estado tuvo un control de su territorio, donde hubo una guerra entre liberales y conservadores que duró decenas de años, donde el comienzo de la guerrilla, de las FARC, se plantea en el año 1964, pero ya desde 1949 había guerra civil".
Ernesto Ottone también se manifestó en desacuerdo con lo expresado por Luis Larraín. (Foto: Radio Cooperativa)
"En Chile lo que hubo fue una dictadura terrorista donde no hubo un Ejército al frente, no hubo un territorio autónomo al frente, hubo ciudadanos que fueron sometidos a crímenes, persecuciones, etcétera, es decir, hay una situación distinta. Yo creo que en Chile se ha hecho bien en cuanto a que no haya habido amnistía de los crímenes", precisó.