El Mandatario, quien se encuentra en su primera gira a Europa, convocó a todos los partidos chilenos en una entrevista en España.
"No estamos disponibles para firmar ningún acuerdo que se escriba con la mano izquierda", afirmó Frank Sauerbaum.
Desde Renovación Nacional (RN) y la Unión Demócrata Independiente (UDI), los partidos con más parlamentarios de la oposición, rechazaron la convocatoria hecha este sábado por el Presidente Gabriel Boric a todos los sectores políticos, para firmar un acuerdo transversal que catalogue como "inaceptables" los derrocamientos armados, a las puertas del aniversario 50 años del golpe de Estado que derribó el gobierno de Salvador Allende (1970-1973) e instauró la feroz dictadura cívico-militar encabezada por Augusto Pinochet (1973-1990).
En medio de su primera visita a España, el Mandatario dijo a Cadena SER que lo que tanto él como el Gobierno esperan es que "convengamos todas las fuerzas políticas, independiente de nuestras posiciones actuales, que un golpe de Estado es inaceptable y que nada, ni las diferencias más agudas, justifican la violación de los derechos humanos de quien piensa distinto ni de nadie".
"Nosotros vamos a invitar a todos los partidos políticos a firmar una declaración justamente en ese sentido", reveló Boric, quien advirtió -en esa línea- que "siempre hay quienes tratan de buscar justificaciones, según el contexto, del quiebre de la democracia".
"Creo que el quiebre de la democracia de un gobierno legalmente constituido y que ejercía democráticamente sus funciones, es sencillamente inaceptable", puntualizó el jefe de Estado.
El llamado del Presidente a firmar una declaración conjunta fue cuestionado por el jefe de la bancada de diputados de RN, Frank Sauerbaum, quien declaró que "no estamos disponibles para firmar ningún acuerdo que se escriba con la mano izquierda, con una visión sesgada y coaptada por el Partido Comunista, una visión de pasado".
Al contrario, "estamos disponibles para hablar del presente, de los problemas actuales que viven los chilenos y del futuro que nos une, no de un pasado que nos divide", aseveró.
Sauerbaum añadió que "preferiríamos que (Boric) venga acá a Chile, a dar cara frente a los chilenos que lo apoyan, apenas con el 25%".
En tanto, desde la UDI, el diputado Juan Manuel Fuenzalida tampoco recibió de buena manera la invitación del Jefe de Estado, acusando que "tenemos un Presidente que actúa de una forma en el país y trata de vestirse de otra forma en el extranjero".
"No olvidemos que ahora el pacto tributario es para generar inversión y crecimiento, cuando todos sabemos que es un alza tributaria. Sin embargo, cacarea en esta gira por Europa, que el pacto fiscal es para invitar inversionistas. Lo mismo pasa con reconocer que los 30 años fueron buenos", criticó el legislador.
Ante esto, indicó que "esta invitación a firmar una declaración conjunta la verdad es que es propia del encandilamiento que está teniendo en su gira, porque acá actúa de otra forma".
La convocatoria del Mandatario fue valorada por la directora del Museo de la Memoria, María Fernanda García, quien aseguró que se trataría de un "piso mínimo ético como sociedad condenar y esperar que nunca más ocurran golpes de Estado ni violaciones a los derechos humanos".
"Creo que son temas que son para todas las personas que no tienen color político, ni un golpe ni tampoco los atropellos y violaciones a los derechos humanos. Por lo tanto, todos los sectores de la sociedad deberíamos firmar o ser parte de una declaración para tener una sociedad más igualitaria, justa y pacífica", puntualizó.
A su vez, el representante de la Red de Sitios de Memoria, Marcelo Acevedo, indicó que "esa carta nos la comentó (Boric) en la reunión que tuvimos con él en La Moneda, tras la salida de Patricio Fernández (renunciado coordinador interministerial para la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado). Nosotros creemos que es un acto republicano y democrático que quiere hacer el Presidente en estos 50 años; por lo tanto, no es dicotómico para nosotros que esa carta la firmen los partidos políticos, incluso la UDI o Republicanos".
Sin embargo, advirtió que un gesto de ese tipo "es muy distinto" a que "los partidos que fueron cómplices de la dictadura (participen) en esta conmemoración".
Hasta hoy, en Chile sigue habiendo 1.159 víctimas de desaparición forzada durante la dictadura que aún son buscadas por sus seres queridos.
La dictadura de Chile duró 17 años y dejó más de 40.000 víctimas, entre ejecutados, detenidos desaparecidos, prisioneros políticos y torturados, según cifras de la comisión oficial que recopiló testimonios de víctimas y familiares. Más de 3.200 chilenos murieron a manos de agentes del Estado.
