El Ministerio de Educación y la Junta Nacional de Auxilio Escolar y Becas (Junaeb) comenzaron una intervención sicosocial para las comunidades educativas afectadas por los incendios forestales en la Región del Maule.
Alrededor de 45 mil estudiantes serán incorporados al programa "Habilidades para la vida", dependiente de la Junaeb, que está dirigida a personas que han vivido fuertes experiencias por desastres naturales.
En el proceso, un grupo de sicológos y profesores trabajarán con las comunidades devastadas desde el impacto socioemocional que vivieron y la preparación de niños y jóvenes de zonas devastadas ante eventuales nuevas situaciones críticas.
Se busca restablecer la vida de los niños y jóvenes, darles seguridad, incorporarlos al aprendizaje y, en especial, a optimizar sus capacidades que se encuentran adormecidas o con ansiedad producto de los temores que les provocó la catástrofe.
Las comunas consideradas para la intervención son San Clemente, Maule, Constitución, San Javier, Yerbas Buenas, Longaví, Retiro, Parral y Cauquenes.
Los cinco pilares del programa
El plan contempla cinco pilares: trabajo en red, abordaje ecológico de la comunidad educativa, enfoque preventivo, competencias y factores protectores y toma de decisiones basadas en la evidencia.
La encargada nacional de programa, Alejandra Vidal, detalló que "esto va a partir con unas encuestas que se están realizando en las comunidades educativas en donde se va a levantar la necesidad emocional y socioemcional que tiene a partir de la mirada de los profesores y directivos, y con esos insumos se van a priorizar, nuevamente, las acciones en cada una de estas comunidades".
"Vamos a tener intervenciones de menor a mayor complejidad de acuerdo a los diagnósticos que van a levantar los propios directivos, los proopios encargados de las comunidades educativas", agregó la encargada.
Evitar impactos en el rendimiento escolar
El Seremi de Educación de El Maule, Rigoberto Espinoza, explicó que, primero, "hicimos el esfuerzo de que en una zona tan afectada por los incendios -la más afectada de todas las regiones- iniciáramos el año escolar el día 6 (de marzo), para que -por tema cronológico- partiéramos en el tiempo correspondiente".
La autoridad educacional precisó que "no solamente queremos reconstruir las escuelas, los útiles escolares y la alimentación, sino que hay todo un tema de apoyo sicosocial que estamos -a través de este programa- desarrollando, y el objetivo de trabajar con las comunidades escolares es evitar que esto pueda tener un impacto en el rendimiento escolar".
