Entre las más de 100 viviendas destruidas producto de los incendios forestales en Florida, en la Región del Biobío, solo una construcción quedó en pie: la casa de Evelyn Vargas, devota de San Sebastián.
La mujer levantó una pequeña gruta en homenaje al santo en el sector La Lajuela, pero debió dejar su casa debido a las llamas.
Mientras se dirigía hacia Concepción, Vargas se encomendó a San Sebastián, ofreciéndole todas sus joyas a cambio de protección para la viviendas.
"Yo vengo y digo 'San Sebastián, protege mi casita por favor, te entrego todas mis joyitas, pero cuidame mi casa' y me fui, arrancamos por el camino de Penco, llegamos a Concepción a la casa de mi hija", dijo Vargas.
"Mi viejo llama a un amigo de Florida y le dice 'anda a mirar cómo está la cosa por allá'. En una cosa de 20 minutos lo llama por teléfono y le dice 'tu casa se salvó, es la única que está parada'", añadió.
Por su parte, Sergio Vargas, hermano de Evelyn, comentó que "no tengo palabras, fue un milagro, suerte, pero se salvó".
"Mi hermana me dijo que había puesto un santo días antes no más, a lo mejor fue eso. Realmente no me lo explico, lo he pensado, lo he dado vuelta, pero no hay caso", dijo.
La mujer concurrió este domingo a pagar su manda, entregando sus joyas al santo.