El analista de incendios forestales, Marc Castellnou, jefe del Equipo del Mecanismo de Protección de la Unión Europea que llegó a Chile a prestar ayuda durante el combate de los siniestros, aseguró que "en ningún país hay recursos para dar respuesta a un fenómeno de esta magnitud".
El balance de los siniestros que afectaron al país, entregado este viernes por el Gobierno, mostró que 20 días duró el combate del segundo incendio forestal más destructivo del siglo XXI a nivel mundial, que consumió 467 mil hectáreas, 77 mil de ellas de bosque nativo, 280 mil de plantaciones y 1.193 de superficie de categoría de conservación.
Además, su rapidez fue tal que en un día creció 1,6 veces la superficie de Santiago.
Castellnou sostuvo que "como equipo técnico en Europa hemos vivido diversos impactos de diversas tormentas de fuego, pero nunca habíamos vivido el impacto de una tormenta de fuego como ésta. Sí es cierto que en el mundo en zonas continentales mayores, donde hay calentamientos y se generan grandes tormentas, como al interior de Canadá, al interior de Siberia, al interior de Australia, se han dado tormentas que se pueden comparar".
"En ese momento, la tormenta de fuego avanzó a un ratio que nosotros no teníamos registrado. 8.240 hectáreas por hora, no una noche, hora. El mayor incendio que nosotros habíamos registrado en Europa avanzó 27 mil hectáreas en 12 horas, pero después de consultar a la comunidad internacional, sí que podemos afirmar que este es uno de los grandes incendios que hemos visto", recalcó.
Equipo UE no había vivido un impacto del fuego de este tipo
El equipo de la Unión Europea está compuesto por 15 miembros y tuvo dos misiones, siendo la primera atacar el fuego con sus unidades de combate y 278 brigadistas de España, Francia y Portugal que llegaron a Chile; y la segunda fue averiguar por qué las llamas tuvieron este comportamiento.
"Sí que podemos afirmar que este es uno de los grandes incendios que hemos visto", afirmó el experto de la UE, Marc Castellnou. (Foto: ATON)
Sus conclusiones fueron que nunca habían vivido un impacto del fuego como éste, el que se detonó por varios factores, entre ellos -afirmaron- la sequía que comenzó en Chile el 2009 y la situación meteorológica extrema con altas temperaturas que hubo durante esos días, además de las altas presiones en el pacífico sur que también afectan a los bosques.
Todo esto, según el análisis, creó una tormenta de fuego con un avance de hasta 8.240 hectáreas por hora, por ejemplo, en la noche del 25 al 26 de enero, cuando fue destruida la localidad de Santa Olga.
717 incendios en 19 días
El diámetro de esta tormenta de fuego fue de 400 kilómetros y el director de la Conaf, Aarón Cavieres, agregó que "tuvimos en total en este megaincendio, entre el 18 de enero y el 5 de febrero, 717 incendios, pero además estamos colocando los incendios que ocurrieron en el resto del país".
"Esto es importante porque no distrajimos todos los recursos de esta región. Fuimos capaces de abordar esos otros incendios y abordarlos a la vez", destacó.
La conclusión de los expertos es que este megaincendio tuvo su base en el cambio climático y se repetirá en otros lugares del mundo, por lo que de lo sucedido en Chile se sacarán aprendizajes para combatir otros siniestros de esta magnitud que ocurran en otros países.
