En Chile cerca de 950 liceos imparten educación técnico profesional en tercero y cuarto medio.
Estos establecimientos tendrán que efectuar profundas modificaciones a su currículum de aquí a 2015 para adoptar los cambios ordenados por el Ministerio de Educación para modernizar este tipo de enseñanza.
Con el nuevo esquema los estudiantes podrán optar entre 34 especialidades y 17 menciones, con énfasis en el área de tecnologías de la información, como programación, conectividad y redes.
En contraste, desaparecerán debido a su baja matrícula, obsolescencia, y por no asegurar condiciones laborales a sus egresados, tradicionales especialidades como secretariado, textil o ventas.
Sistema "muy desactualizado"
La ministra de Educación, Carolina Schmidt, explicó este viernes en El Diario de Cooperativa los fundamentos de esta reforma, y despejó las dudas en torno al futuro de los alumnos y profesores embarcados en las especialidades que desaparecerán.
"Chile necesita buenos técnicos. La mayoría de la población –el 43 por ciento- de todos los terceros y cuartos medios, prefiere ir a liceos técnicos por la posibilidad de emplearse antes en el mercado laboral. Sin embargo, todo el sistema técnico profesional en los liceos estaba muy desactualizado y muy desalineado con las necesidades que tenían en el campo laboral los distintos sectores productivos", dijo Schmidt.
"Por eso el Ministerio decidió hacer una profunda modernización de todo el sistema escolar técnico profesional y alinearlo con los sectores productivos para que, justamente, los jóvenes tengan la posibilidad de acceder a más y mejores empleos", indicó la secretaria de Estado.
Explicó que "en 2014 los establecimientos que quieran podrán ir implementándolo voluntariamente" y "a partir de marzo de 2015 va a ser obligatorio y ningún liceo puede recibir alumnos en tercero medio con las antiguas especialidades".
Situación de alumnos y profesores
Schmidt negó las declaraciones del presidente del Colegio de Profesores, Jaime Gajardo, quien acusó que con las medidas anunciadas ayer 7.000 docentes quedarían cesantes.
"Eso es falso. De los 16.000 docentes que están en los liceos técnicos profesionales hay 280 docentes que están dedicados a las carreras que se eliminan del sistema", y ellos serán "prioritarios" para la "capacitación del CPEIP (Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas)".
No obstante, "nosotros estamos llamando a una completa re capacitación de los docentes técnico profesionales de los liceos".
A la vez, "aquellos alumnos que hoy están en tercero o cuarto medio en las menciones (eliminadas) terminan sus estudios" simplemente, pero "como (éstas) tienen baja contratación, se les da prioridad para que puedan reconvertirse en la educación superior técnico profesional. (Por eso) estamos dirigiendo las becas especialmente para ellos", señaló.
La ministra señaló, finalmente, que este cambio "se desarrolló en conjunto con los gremios, con profesores, para producir una integralidad, y está regulado por la Superintendencia de Educación, que rige todo el sistema escolar y que se implementó el año pasado".
La opinión de los directores
Cooperativa consultó también la opinión de expertos en educación y directores de liceos técnicos profesionales sobre las modificaciones dispuestas por el Gobierno.
"Si queremos dar una buena formación técnica tiene que contarse con los elementos", manifestó Cecilia Rodríguez, directora del Liceo Agrícola de Talagante, que acusó "falta de regulación, supervisión" sobre esta área.
"Hay que apuntar a las nuevas especialidades dentro del área técnico profesional. Dentro de ésas está la minería, que es muy bueno", apuntó, Eduardo Flores, director del Liceo Cóndores Poniente de Renca.
Por aclarar
Carlos Concha, académico de la Universidad Alberto Hurtado, valoró las medidas dispuestas por el Mineduc, pero indicó que hay temas de fondo que no quedan claros, y hay "vacíos" en áreas como la capacitación de los docentes.
"No hay detrás del anuncio un apoyo a cómo se van a implementar estos cambios. No está previsto -que yo sepa- un proyecto, un programa, de actualización o formación de profesores técnicos o de actualización en la especialidad o la didáctica o la enseñanza de parte de los profesores técnicos", dijo Concha.
"Eso queda en el vacío. Por lo tanto, cuando los cambios curriculares no van acompañados de programas de apoyo a su implementación, son sólo papeles", advirtió el académico.
En la misma línea, César Muñoz, investigador de política educativa de la fundación Educación 2020, advirtió que falta precisar qué pasará con los alumnos que actualmente estudian las especialidaes que serán eliminadas.
"Sería súper importante saber qué va a pasar con este período de transición, qué va a pasar con esos alumnos y qué va a pasar, además, en el mercado laboral para ellos. (...) El eliminar estas carreras es una señal de que a lo mejor son especialidades que ya no importan a la economía del país", indicó Muñoz.
Estos anuncios se prepararon sobre la base a un diagnóstico bastante negativo de los planes y programas que reciben los jóvenes que ven en la educación técnica una posibilidad de salir adelante.
El estudio "Educación técnico profesional en Chile. Antecedentes y claves de diagnóstico", indica que el 40 por ciento de los egresados de este tipo de establecimientos nunca se titula. Otro 40 por ciento no logra desempeñarse en lo que estudió, y no continúa sus estudios superiores.
Sólo un 20 por ciento logra encontrar empleo en el área en que se formó.