Las malas condiciones que viven alumnos y profesores del INBA

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Autor: Cooperativa.cl

Acusan que orina del segundo piso gotea hacia el primero.

Emplazaron a la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, por reparaciones.

Las malas condiciones que viven alumnos y profesores del INBA
 Maritza Tapia

En algunas salas se mantiene la suciedad y los escritorios amontonados.

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Profesores y alumnos del Internado Nacional Barros Arana (INBA) dieron a conocer las malas condiciones en que se encuentra el colegio tras denunciar la semana pasada las serias deficiencias en la reconstrucción del establecimiento del centro de Santiago tras el terremoto de 2010.

El viernes de la semana pasada los estamentos del centro educacional anunciaron movilizaciones para llamar la atención respecto de las carencias que viven todos los días y denunciaron que la alcaldesa de Santiago, Carolina Tohá, no ha respondido a sus promesas.

Tatiana Cheix, profesora de historia y una de las voceras de los académicos, reveló que "ella (Tohá) visitó el liceo en el mes de mayo y se comprometió a que el 30 de junio estaría reparado el establecimiento. Hemos presionado de diversas maneras para ver cuándo vamos a tener una respuesta satisfactoria".

La académica agregó que tienen "demandas tan básicas para un establecimiento educacional como que los baños del segundo piso de los estudiantes se gotea con orina hacia el primer piso".

"Vemos que nadie se hace responsable, la empresa no asume responsabilidades -nunca las ha asumido- y tampoco aparentemente ahora las personas encargadas por la autoridad han asumido responsabilidades. Queremos que alguien se comprometa con el establecimiento", agregó Cheix.

También afirmó que las salas se inundan con la lluvia y los laboratorios de ciencias no tienen instalaciones adecuadas.

Los estudiantes se mostraron decepcionados y acusan que la empresa encargada de la reparación junto al municipio sacaron parte del mobiliario sin devolverlo entre eso dos pianos que los acompañaban desde hacía varios años.

Roberto Palacios, vicepresidente del centro de alumnos del INBA manifestó que se sienten "estafados, traicionados, pasados a llevar. Los sentimientos que un inbano, un ex alumno, un alumno actual y un alumno de todos estos años van mucho más allá de eso. Es un robo a lo que él vivió".

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La humedad marca los muros del INBA (Foto: Maritza Tapia / Cooperativa)

 

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