El arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, dijo que en la reforma educacional "se percibe un esfuerzo enorme por fabricar puertas y ventanas, sin saber para cuál edificio", palabras que no tardaron en tener reacciones desde La Moneda.
En una entrevista con El Mercurio, el cardenal indicó hay una falta arquitectónica, que se ha privilegiado lo instrumental, que se han anunciado fragmentos parciales carentes de organización educativa, con modificaciones continuas y contradictorias.
Ante esto, el ministro vocero de Gobierno, Alvaro Elizalde, contestó que se trata de una reforma educacional íntegra, que abarcará diálogo con todas las iglesias.
"El Gobierno está promoviendo un diálogo social para la reforma educacional y están invitados a participar en ese diálogo todos los ciudadanos y todas las instituciones. Por cierto, no solo la Iglesia Católica, sino que todas las iglesias", indicó.
Elizalde añadió que "nos interesa que efectivamente, de este proceso de diálogo, se generen las mejores condiciones para llevar adelante una reforma que es fundamental para el país. En este marco, todas las miradas deben ser consideradas para impulsar esta transformación que es fundamental para Chile".
Oposición apoyó declaraciones de Ezzati
Desde la oposición coinciden con el diálogo del arzobispo de Santiago, especialmente lo que respecta a las fallas comunicacionales de los últimos días. El senador de RN, Andrés Allamand, indicó que "comparto 100 por ciento las expresiones del cardenal Ezzati".
"La reforma educacional está haciendo agua precisamente por la razón que él dice, porque adolece, porque le falta una arquitectura general al proyecto", agregó.
Mientras que su par de la UDI, Hernán Larraín, expresó que Ezzati "está planteando con otras palabras lo mismo que nosotros creemos y, por eso, más allá de los contenidos, creemos que es urgente que el Gobierno se ordene en el campo educacional".
Ambos senadores presentarán dentro de los próximos días una serie de propuestas y críticas a la reforma educacional.
