La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Católica, Naschla Aburman, acusó que la designación de la futura subsecretaria de Educación, Claudia Peirano viene "con letra chica" y negó cualquier conflicto de interés al ser Ignacio Oliva, vicepresidente de la FEUC, hijo de la autoridad.
"Eso es una relación sanguínea que nadie puede negar. Somos adultos, nadie puede hacer que un hijo deje de ser hijo de su madre y una madre, madre de su hijo. Son roles completamente distintos, es algo que pasa y que no vamos a negar", señaló la dirigenta estudiantil en El Primer Café de Cooperativa.
Aburman añadió que "como FEUC tenemos nuestras líneas claras, como voceros del movimiento estudiantil también, en esa línea nos hemos movido siempre y aquí no hay ningún conflicto de interés (...) es un tema muy distinto que tener intereses personales o comerciales, son cosas distintas".
Sobre la polémica por la designación de Peirano, la dirigenta precisó que "aquí hay una clara señal en una dirección completamente equivocada a la que todos esperábamos. Si con Eyzaguirre teníamos dudas, con el nombramiento de la nueva subsecretaria tenemos certezas y antecedentes que vienen a confirmar nuestra profunda desconfianza".
"La subsecretaria recién designada, en sus declaraciones más recientes, presenta divergencias claras en temas como el lucro, el financiamiento compartido, la gratuidad, que son hechos fundamentales del programa de Michelle Bachelet", criticó la representante de los estudiantes.
Naschla Aburman resaltó que "esta designación venía con letra chica y alguien tiene que pronunciarse. No pueden esperar que dejemos pasar esta irregularidad, por lo bajo es poco estético, por lo tanto, creemos que corresponde que desde hoy empiecen a pronunciarse no sólo desde el gobierno sino desde la subsecretaría y el Ministerio de Educación".
"Necesitamos tener claridades sobre cuál es el camino que va a seguir el próximo Gobierno y las señales que tenemos hasta hoy dejan mucho que desear", concluyó.