La iniciativa busca garantizar que la comunidad científica cuente con recursos de cómputo necesarios para mantener niveles de competitividad a nivel internacional.
Zolezzi destacó que "estas herramientas que están a disposición, para trabajar a nivel de supercómputo, permiten tomar decisiones para lo que viene en el futuro".
La Universidad de Santiago y otras 38 casas de estudios, además de cuatro centros de investigación la Red Universitaria Nacional (REUNA) firmaron un convenio para la creación del Laboratorio Nacional de Supercomputación.
La iniciativa busca garantizar que la comunidad científica cuente con recursos de cómputo necesarios para mantener niveles de competitividad a nivel internacional, contribuyendo al desarrollo científico nacional.
Participaron en la firma del convenio el rector de la Universidad de Santiago y vicepresidente ejecutivo del Consejo de Rectores, Juan Manuel Zolezzi; el ministro de Ciencia, Flavio Salazar; y el investigador y director científico del proyecto, Jaime San Martín, entre otros.
Zolezzi destacó que esta iniciativa "incide en todos los proyectos que realizan investigadores y académicos de las distintas universidades, para que puedan realizar proyectos de manejo de información con alta cantidad de datos, de una manera mucho más rápida y simple".
"Hoy, hay tanta información que no sabemos cómo manejarla. Estas herramientas que están a disposición, para trabajar a nivel de supercómputo, permiten tomar decisiones para lo que viene en el futuro, en todos los ámbitos de la vida humana", enfatizó.
El ministro Salazar, por su parte, valoró la relevancia del convenio para el país destacando que "podemos construir una institucionalidad que permita avanzar en resolver muchos problemas que afectan a la gente, como el cambio climático o la crisis hídrica".
Finalmente, San Martín explicó que la Usach y otras universidades impulsaron, hace 12 años, un pequeño centro de supercómputo, que daba servicio a todos los investigadores de Chile. El proyecto actual busca optimizar este modelo.
"Se trata de un sistema nervioso de alta velocidad, que permite que estos cómputos y memoria funcionen a una velocidad muy superior a la de un computador", graficó el director. "Es como tener miles de computadores trabajando juntos", concluyó.
