"Había muchos factores que no eran viables", dijo la presidenta de la Federación de Estudiante, Paz Gajardo.
"Claramente, no va a ser la última que va a quebrar", agregó.
"Nosotros creemos en la educación pública y queremos saber si la educación pública cree en nosotros", dijeron los alumnos de la Iberoamericana.
La presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Iberoamericana, Paz Gajardo, se refirió este viernes a la decisión del Consejo Nacional de Educación (CNED) de cerrar la citada casa de estudios, explicó cómo se dio el quiebre de la universidad y por qué quieren reubicarse a universidades estatales.
"Estamos tranquilos, lo esperábamos hace tiempo. (...) Este déficit financiero se viene desatando desde el 2011, pero nunca fue concreto que la universidad se iba a cerrar. Nosotros ya el año pasado, en mayo, empezamos a vislumbrar que la universidad se iba a cerrar. Había muchos factores que no eran viables", dijo.
"Nosotros fuimos siempre un paso adelante, teníamos mas información que la misma universidad. Empezamos a tener contacto con la Confech, después empezamos a tener conversaciones con Sandra Beltrami (de la Federación de la Arcis) empezamos a hacer cuadros comparativos que demostraron que íbamos al mismo fin", agregó Gajardo.
"Además, el vicepresidente de la Federación, Javier Mora, viene de la Universidad del Mar, por lo que había muchos antecedentes que daban para un cierre", concluyó la dirigenta estudiantil.
Becas de reubicación y permanencia
Sobre el petitorio de los alumnos para cambiarse a universidades estatales y acceder a becas de reubicación y de permanencia, Paz Gajardo explicó que "éstas son las que nos van a dar la continuidad académica".
"Ésta es una responsabilidad el Estado, nosotros creemos en la educación pública y queremos saber si la educación pública cree en nosotros", añadió.
"Si el ente superior da la oportunidad de abrir una nueva universidad y se acaba la gallina de los huevos de oro, alguien se tiene que hacer responsable y ese es el Estado por dejar abrir estas universidades. Hoy, son ellos quienes nos tienen que abrir las puertas para que podamos terminar estudiar", agregó.
"Como tengo compañeros que ya fueron ubicados, no creo que sea lógico volverlos a reubicar en universidades privadas que no sabemos si van a seguir adelante porque claramente la Iberoamericana no va a ser la última que va a quebrar", aseveró.
Cambio independiente
Respecto a los alumnos que deseen cambiarse de universidad de forma indpendiente, Gajardo pidió a sus compañeros que no lo hagan porque "es una opción fácil para el Ministerio, es como hacerle la pega".
"Nosotros hemos hecho un llamado como Federación a que no se reubiquen ellos mismos y que esperen que el Ministerio se haga responsable y los deje reubicados en buenas universidades, por lo menos con acreditación de cuatro años si son privadas", dijo.
"Es súper fácil decir 'esta casa de estudios fracasó, por lo tanto, toma tus cosas y cámbiate donde tu quieras, bajo tu responsabilidad'. Entonces, no tomas la garantía que da el Ministerio para reubicarse, no van a poder acceder a las becas de reubicación ni permanencia. Hemos sido súper maltratados, por lo que no corresponde que nuestros compañeros busquen una reubicación por ellos mismos", agregó.
Salir con un título de la Iberoamericana
Por último, la presidenta de la Federación de Estudiantes se refirió a la situación que espera a los alumnos cuando salgan a buscar trabajo con un título de una universidad cerrada.
"Es complejo, vivimos en un país demasiado prejuicioso, estamos acostumbrados a enjuiciar a las personas antes de conocerlas. Cargamos con el estigma de salir de una universidad privada y además de salir de una universidad que cerró", aseguró.
"Sin embargo, la Iberoamericana no cerró por falta o mala calidad de docentes, como la Universidad del Mar. Vamos a cargar con el estigma del cierre de la universidad pero tratamos de dejar en claro que la Iberoamericana no tuvo falencias académicas, no somos malos profesionales", concluyó.
