Una grave crisis financiera viven las universidades de Aysén y la Austral (Región de Los Lagos), las que se enfrentan a investigaciones y exigencias de la Superintendencia de Educación Superior (SES) para remediar sus millonarias deudas.
Por un lado, la U. de Aysén –estatal y fundada en 2015- arrastra una crisis que impide incluso pagar las remuneraciones de sus trabajadores, que se encuentran en paro indefinido desde el 6 de noviembre.
La SES inició un proceso de investigación el 6 de julio pasado en la institución, que dio cuenta que tiene un déficit por casi $3 mil millones, según consignó El Mercurio.
El órgano anunció que formulará cargos, iniciando un procedimiento administrativo que puede derivar en: la solicitud para que la universidad comience un plan de recuperación, la designación de un administrador provisional o de cierre.
"NO HAY CAJA"
Al respecto, los funcionarios señalan que se le había hecho saber a las autoridades universitarias la situación, cuando su rectora era Natacha Pino. "Lamentablemente, nunca se tomaron en cuenta las alertas, se siguió contratando gente, hay una sobre dotación de personal, eso es efectivo", indicó Jeannette Soto, presidenta de la Asociación de Funcionarios y Académicos de la universidad.
"Estamos en una situación crítica, financiera y administrativa, de gestión. No tenemos recursos, no hay caja para el pago de los funcionarios. No nos pagaron septiembre en la totalidad, solo porcentajes, entre el 80% y 0%, en el caso del equipo directivo", enfatizó Soto.
Por otro lado, el actual rector, Enrique Urra, consignó al diario que recibió el informe de la SES, pero no los cargos. "Entendemos que es un proceso que partió en julio y obedece a la institucionalidad a propósito de las problemáticas financieras que tiene nuestra universidad. Nosotros, como institución, nos colocamos a total disposición para seguir este proceso, y teniendo esta información, lo que corresponde es que la analicemos y la trabajemos con nuestros órganos colegiados".
Bajo esa misma línea, apuntó que desde que asumió el cargo, en septiembre de este año, ha impulsado una serie de medidas que requerirán el despido de funcionarios para "ajustar la estructura organizacional". Son acciones "complejas, pero necesarias", aseguró.
Asimismo, afirmó que "desde hace tiempo el Ministerio de Educación ha sido claro en decir que la universidad de ninguna forma a cerrar".
Sin embargo, entre los funcionarios hay incertidumbre porque "no ha habido transparencia", acusa Jeannette Soto. "Se nos ha hablado de unos 70 funcionarios (despedidos), pero podría variar, porque están viendo los costos asociados".
"Le hemos pedido a la autoridad que dé a conocer cuáles serán los criterios (para las desvinculaciones)", concluyó Soto.
U. AUSTRAL ADEUDA CASI 92 MIL MILLONES
Por otro lado, la SES relevó sobre su investigación a la Universidad Austral de Chile (privada tradicional, fundada en 1954 y que forma parte del Consejo de Rectores y la Red G9) que adeuda casi 92 mil millones de pesos, situación que pone en riesgo el pago de sueldos en 2024.
En concreto, el órgano señaló que la institución "ha incumplido obligaciones financieras contenidas en contratos de créditos vigentes y que la registra una deuda financiera que alcanza los $91.868 millones".
Igualmente, constató que existe un débil ambiente de control administrativo interno y diferencias expresadas en los órganos colegiados de la casa de estudios. "Lo que dificulta el diseño, articulación e implementación de medidas estratégicas que requiere para hacer frente a esta situación".
En esa línea, apuntó que las medidas proyectadas por la UACh son insuficientes "para cumplir con las obligaciones financieras". Por esto, se le ordenó la elaboración de un plan de recuperación con plazo de 60 días, para ser aprobado y controlado por la Superintendencia, indicó El Mercurio.
"Como rectoría valoramos ese escenario y reafirmamos nuestro compromiso para concordar las medidas que han estado proponiendo y que a través de este plan permitirán llevar a cabo un proceso de recuperación, fortalecimiento y modernización, asegurando también el buen uso de nuestros recursos, para lograr nuestra sostenibilidad institucional", escribió en una carta dirigida a la comunidad su rector Hans Richter.
Agregó que el plan deberá tener "las medidas concretas que sean necesarias para resguardar la viabilidad financiera, administrativa, laboral y académica de la institución y subsanar los problemas identificados en la etapa de investigación".