El diagnóstico a la universidad está expuesto en el decreto de cierre.
El proceso de clausura debe estar zanjado el 28 de febrero de 2015.
El decreto que sentencia el cierre de la Universidad del Mar y su eliminación del registro de universidades del Ministerio de Educación determina que existe fragmentación de la institución, abandono del proyecto educativo e inviabilidad financiera.
Dentro de las razones expuestas en el documento, se explica que la casa de estudios
"no tiene un sistema de gestión institucional, administrativo, financiero y académico consistente y coherente con la estructura interna de la corporación".
El texto agrega que "no se aplican procesos de autoevaluación y mejoramiento de la calidad", además del "no cumplimiento de las obligaciones contractuales con docentes, pagando con retraso o adeudando remuneraciones, honorarios, cotizaciones previsionales y de salud".
Asimismo, se señala que la universidad "no presta los servicios educacionales comprometidos con los estudiantes, por la no realización de clases y no entrega de calificaciones de los cursos".
Finalmente, el documento indica que la Junta Directiva, formada a mediados de 2012, no cumple con las normas de la propia institución.
Este proceso de cierre debe estar zanjado el 28 de febrero de 2015, fecha que puede ser aplazada por una sola vez a criterio del Ministerio de Educación.
¿Y cómo seguirá funcionando?
Sobre cómo se mantendrá el plantel hasta ese momento, el ministro de Educación (s), Fernando Rojas, explicó que "no hay cifras confiables que permitan hacer un mejor diagnóstico y tampoco hay facultades del Ministerio de Educación para permitir un trabajo coordinado y sistemático con los docentes para facilitar la continuidad de la universidad".
Aún queda pendiente la cancelación de la última cuota de los recursos Crédito con Aval del Estado (CAE), correspondientes a los sueldos de enero de los funcionarios. Desde ese momento, la universidad no recibirá más recursos del Estado.
