La Universidad de Chile realiza una investigación sumaria a 61 jóvenes de dos secciones del ramo de Métodos Experimentales, que cursan estudiantes de segundo año del plan común de Ingeniería, por cuanto habrían incurrido en irregularidades vinculadas con la ética académica en los controles efectuados los días 26 de abril, 24 de mayo y 5 de julio.
En cada una de las evaluaciones, el docente dio ocho horas a contar de las 10:00 para subir a U-Cursos el archivo con las respuestas a los diferentes enunciados que envió vía correo electrónico, según consignó LUN.
Cuatro días después del último examen, el jefe docente del Departamento de Física (DFI) dio aviso del sumario a los estudiantes de las secciones 3 y 4 de la asignatura, que lleva el profesor René Méndez, indicando que "se detectaron irregularidades serias, existiendo transferencia de información flagrante relativa a soluciones de cada uno de los controles del curso, usando herramientas de mensajería instantánea entre estudiantes" como es el caso de WhatsApp.
Si bien se habría encontrado un sistema de traspaso de información -aunque se desconoce cómo se llegó a esos mensajes-, los profesores sólo recopilaron números de celulares sin nombres asignados, algo que pasa cuando no todos los participantes de un grupo de WhatsApp están registrados en el teléfono del dueño.
Considerando aquello, el plantel abrió "la posibilidad de reconocer su participación mediante un correo electrónico escrito directamente al profesor René Méndez", mientras que la unidad académica enfatizó que "tales faltas a la ética son abordadas con mucha rigurosidad porque transgreden los principios universitarios que esta casa de estudios impulsa en la formación de nuestros estudiantes".
En cuanto a las calificaciones de los involucrados, el DFI optó por aplicar una evaluación adicional, cuya nota reemplazará las de los tres controles del ramo.
ESTUDIANTES CUESTIONAN LLAMADAS A VINCULADOS
Por otro lado, los estudiantes han cuestionado el método utilizado por la casa de estudios para identificar a los vinculados: el jueves pasado, uno de ellos publicó en el foro de la comunidad de Ingeniería de U-Cursos que una persona que lo llamó le pidió su nombre completo y su RUT, experiencia que al menos otros siete compartieron en la misma plataforma.
"A algunos les dijeron que era para una base de datos del DFI, a otros les dijeron que era un estudiante del ramo Métodos Experimentales, y a mí me dijeron que era para una actividad de la Escuela de Ingeniería", precisaba la publicación.
El día después de ese posteo, el jefe docente indicó mediante un nuevo comunicado que "ayer nuestra secretaria docente contactó a estudiantes que estaban en la lista de los 61 sospechosos de copia y luego de recibir respuestas incómodas o irrespetuosas para con ella, decidió cambiar su nombre como forma de proteger su identidad".
Asimismo, aseguró que "luego de ayudar en el trabajo de identificación, y presentándome siempre por mi nombre completo y cargo, recibí llamadas y mensajes en tono amenazante. Asumo que uno/a de los estudiantes puede haber pensado que se trataba de una estafa telefónica y decidió amenazarme", por lo que hizo hincapié en su consternación "al asistir a un proceso de copia masivo y flagrante, en donde pareciera que los responsables fuésemos nosotros al buscar identificar a los estudiantes sospechosos".
