Hasta hace algunos años era tradicional que los cambios de horario de invierno y verano se realizaran el segundo sábado de marzo y el segundo sábado de octubre, respectivamente, pero con el paso del tiempo y por diversos hechos -incluidos terremotos y la sequía- el horario de invierno se ha ido retrasando y su extensión ha disminuido.
Para este año, el inicio del horario de invierno está previsto para el domingo 14 de mayo a las 00:00 horas, cuando los relojes tengan que atrasarse en 60 minutos, con lo cual el horario de Chile Continental quedará en el huso horario UTC -4.
En tanto, en el caso de Chile Insular Occidental -es decir, Isla de Pascua e Isla Salas y Gómez- a las 22:00 horas del mismo sábado también se retrasarán los relojes 60 minutos, quedando en el huso horario UTC -6.
Con la excepción de Magallanes
En tanto, en la Región de Magallanes y la Antártica Chilena se mantendrá en el huso horario UTC-3, ya que por medio de un decreto del año pasado se definió que el horario de verano será permanente en la zona, una demanda histórica en la región, para aprovechar mejor la luz natural.
El alcalde de Punta Arenas, Claudio Radonich, admite, sin embargo, que la medida "puede significar algunas pequeñas complicaciones en la vida diaria; por ejemplo para las personas que querían comprar pasajes aéreos y necesitan traslados o alguna conexión, que deben tener ojo con la hora".
También hay que considerar "el tema de los bancos, porque estamos en línea y hay que ver a qué hora se van a recibir los depósitos o los canjes". Algo similar ocurre con "los juegos de azar en línea, como el Loto", e incluso la programación de "las teleseries y las noticias nacionales", o los partidos de la selección de fútbol.
El horario de invierno se extenderá este año solo por cuatro meses, hasta la medianoche del domingo 13 de agosto.