Claudia Rivera, directora de la Conama de Coquimbo, se refirió a la aprobación del proyecto de la termoeléctrica Barrancones y al compromiso del Presidente Sebastián Piñera de no permitir la instalación de industrias que atenten contra el medio ambiente.
"Lo que manifestó el Presidente en su ocasión fue mostrarse en contra de las termoeléctricas que atentan gravemente contra la flora y la fauna, situación que no se replica en este caso y que fue debidamente evaluado por prácticamente tres años", indicó a El Diario de Cooperativa.
Rivera expresó que "el impacto ambiental que el proyecto generaría se encuentra entre los límites permitidos por las normativas como: calidad de aire, material particulado, emisión de dióxido de azufre. Todos los impactos fueron debidamente evaluados y ponderados por los servicios que participación del comité de evaluación del proyecto".
Consultada sobre las indicaciones de la ONU, que declara a las empresas termoeléctricas como una de las generadoras de energía más contaminantes, la directora de la Conama de Coquimbo sostuvo que "eso no es efectivo".
"En países desarrollados como España se usan plantas termoeléctricas y plantas nucleares para generar energía al sector productivo y se utilizan otras fuentes alternativas para el abastecimiento eléctrico de las ciudades", agregó.
Recalcó que "la central no está en Punta de Choros, la distancia entre Punta de Choros y el área del proyecto es sobre 25 kilómetros. Esto esta en Punta Barrancones, el puerto mecanizado, y en Bahía Ramadilla el área de descarga, frente a esta ensenada estarán las tres unidades de la central termoeléctrica".