La cabo segundo de Carabineros María José Hernández presentó una querella en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago por el delito de homicidio frustrado debido a la agresión que sufrió el pasado 4 de noviembre en el sector de Plaza Baquedano.
La funcionaria de Fuerzas Especiales recibió aquel día el impacto de una bomba molotov lanzada por un encapuchado que se encontraba realizando disturbios en el sector.
"Estaba cumpliendo con mi labor como carabinera. El momento en que me impactó la molotov en mi casco yo no sentí tanto, porque cuando golpeó la molotov el casco y explotó sentí un pito en el oído, de ahí me desesperé cuando vi el fuego y gracias a mis amigos, a mis colegas, que son como mi familia, me salvaron la vida", relató.
En ese marco, la uniformada tachó, "en una sola palabra", que el ataque "fue cobarde".
Producto de este ataque, la carabinera resultó con quemaduras en su rostro, cuello, párpados, nariz y en su cuero cabelludo, por lo que estuvo internada tres días en la UTI del hospital institucional.
Actualmente, la cabo Hernández se encuentra con tratamiento psicológico y psiquiátrico.