La socióloga experta en seguridad, Lucía Dammert, señaló en conversación con El Diario de Cooperativa que "hay que aumentar los niveles de control" interno y externo en las instituciones al analizar la situación que vive Carabineros tras la detención de cuatro funcionarios del OS-7 de Arica.
"Lo que está pasando es gravísimo, principalmente, porque impacta en una percepción generalizada de la ciudadanía, de que las cosas se estaban tratando de hacer lo mejor posible frente al crimen, en general, y al narcotráfico, en particular", apuntó la académica de la Usach.
Dammert añadió que "también es responsable reconocer que hoy día el crimen se ha sofisticado, que tiene acceso a mucho dinero y, en todos los países donde encuentras este tipo de situaciones, hay que aumentar los niveles de control interno institucional para evitar este tipo de casos".
"Tiene que haber controles internos, pero también externos, para asegurarnos que la investigación va a realizarse con toda la probidad y buscando todas las vinculaciones que pudiera tener el caso", remarcó la especialista.
A juicio de la profesional, "Carabineros debe estar preocupado, porque esto les pega en su línea de flotación principal, que es el reconocimiento ciudadano".
Cuestionamiento a investigaciones internas
La académica peruana enfatizó que frente a estas situaciones, "el Ministerio del Interior, que es el responsable político de las instituciones policiales, pudiera asumir un rol mucho más de Gobierno, mucho más de control respecto a lo que hacen las instituciones".
"Dentro de las instituciones jerárquicas, no beligerantes, como son las policías, con altos niveles de corporativismo, como son todas las policías del mundo, en general, las investigaciones tienden a tener ribetes que no necesariamente son los más apropiados", añadió.
De acuerdo con Dammert, esto sucede porque "la mayoría de la gente pertenece a las mismas generaciones, se conocen, buscan mecanismos para que la institución no sea golpeada en profundidad".
Plan Frontera Norte
Respecto a los posibles cuestionamientos que pudieran surgir al plan Frontera Norte, la experta afirmó que "hay que buscar un punto de inicio que marque una segunda etapa con el plan Frontera Norte y esa evaluación, no tanto en su impacto, sino también en la auditoría de sus procesos va a ayudar a saber si vale la pena continuar o si se requiere de un cambio de perspectiva".
"Lo primero que tiene que hacer el próximo Gobierno es una auditoría completa del programa, para tener claridad de exactamente saber lo que se está haciendo, cómo se han comprado las cosas, para qué se han comprado, cuál es la utilidad de las mismas, para partir con una buena base", agregó.
Finalmente, la académica de la Usach subrayó que "es muy importante reconocer que cuando el plan Frontera Norte dice que cada vez decomisa más droga, eso no necesariamente es un indicador de éxito, sino muchas veces los Gobiernos tienden a decomisar el mismo porcentaje de droga que hay en el mercado".