¿Cómo es un funeral de Estado en Chile?
Las ceremonias cumplen un protocolo especial, aunque también cuentan con la venia de la familia del fallecido.
En 2016 se realizó el último funeral de Estado, por la muerte de Patricio Aylwin.
Las ceremonias cumplen un protocolo especial, aunque también cuentan con la venia de la familia del fallecido.
En 2016 se realizó el último funeral de Estado, por la muerte de Patricio Aylwin.
A raíz del deceso del expresidente Sebastián Piñera, el Gobierno decretó un duelo nacional de tres días, recalcando además que el político que habitara La Moneda en dos períodos (2010-2014 y 2018-2022) tendrá un funeral de Estado.
Las ceremonias cumplen un protocolo especial, aunque también cuentan con la venia de la familia del fallecido.
En Chile, un funeral de Estado implica la participación de los tres poderes en la despedida del Presidente o exPresidente recién fallecido, y las normativas protocolares son dispuestas por el Ministerio del Interior.
En primer término, las dependencias estatales -desde reparticiones públicas hasta unidades militares- izarán a media asta la bandera nacional. Durante los días de duelo nacional también quedan suspendidos los actos de Gobierno que tengan carácter de festejo o celebración.
La familia define cuándo y cómo se lleve a cabo algún tipo de ceremonia religiosa, si es el caso. Esto implica que puede haber un velorio privado, aunque también se puede contemplar espacios para que la ciudadanía rinda un homenaje.
A las exequias públicas asisten autoridades de Gobierno, los presidentes del Senado y la Cámara, de la Corte Suprema, diplomáticos y personalidades extranjeras que hayan llegado al país con motivo del funeral.
En todo momento, el féretro del fallecido mandatario cuenta con escolta militar y recibe honores de diversas unidades de las Fuerzas Armadas.
Además, la parte final del funeral suele ser privada, dando espacio a la familia y amigos para despedir a quien ha partido.
En 2016, el Poder Judicial realizó una cápsula especial, detallando cómo se lleva a cabo la ceremonia.