El exministro de Justicia Isidro Solís (Amarillos) aseguró en El Primer Café que el Presidente Gabriel Boric es "de facto y jurídicamente" un testigo de oída tras conocer del caso del exsubsecretario Manuel Monsalve antes de la denuncia por violación, por lo que "lo van a tener que llamar a declarar".
El vicepresidente de Amarillos señaló que hay que separar las cosas: "uno es lo que ocurrió en la conducta del subsecretario Monsalve, y luego es cómo el Gobierno administra la crisis. Y mi opinión es que el manejo de crisis fue pésimo (...). Y, por lo tanto, cuando te plantean una situación de esta naturaleza, es evidente que la crisis es tan gigantesca que exige un funcionamiento muy perfecto. Y todo funcionó mal".
"Yo sostengo que, efectivamente, había institucionalidad suficiente para que el subsecretario hubiera dejado su cargo de inmediato. A lo menos al amparo de la ley Karin, lo que correspondía es que él fuera suspendido de su cargo y que fuera separado", remarcó.
Por otra parte, indicó que "el ABC de la política es que, siendo nuestro sistema institucional un sistema presidencial y siendo el Presidente el corazón, el núcleo del poder, la protección del sistema político y, por lo menos de un gobierno, va siempre el Presidente. Entonces, es un error tremendo haber llevado esta crisis al escritorio presidencial".
"No hay dos lecturas, todo esto fue un error, todas las decisiones tomadas durante las primeras 48 horas, son todo un error. No son un crimen, son un error", añadió.
Además, respecto a la cuestionada conferencia de prensa del Mandatario del viernes, Solís sostuvo que "cuando el Presidente además dice públicamente que su primera actuación es citar al subsecretario y conversar con él respecto a lo ocurrido, él se transforma de facto y jurídicamente hablando en un testigo de oída. Y lo van a tener que llamar a declarar después de su propia declaración".
El diputado Cristián Labbé (UDI) criticó en El Primer Café que en la institucionalidad del Gobierno "existen ministros, existen piezas, existen luces amarillas, existen tapones para no llegar directamente al Presidente. Y fallaron todos".
"Más allá de empezar a individualizar, falla el sistema completo y afectan directamente y exponen al Presidente de la República en un punto de prensa que fue totalmente desproporcional a lo que él tiene que hacer, se enfrasca en una discusión con una mujer, que es su asesora. La verdad, si tuviéramos que agarrar el manual de cómo no se hacen las cosas, finalmente este Gobierno vuelve a tomarlo", declaró el parlamentario de oposición.
A su juicio, "en todas las crisis tiene que haber un manejo de crisis, evidentemente, y se pueden hacer bien, o más o menos o mal. Ellos hicieron todo mal, pero es por la soberbia".
