El presidente de la FECh, Gabriel Boric, consideró "impresentable" que el Gobierno haya puesto un tercer ministro en la cartera de Educación en sólo un año, al referirse a la nominación de Harald Beyer, que sucede a las administraciones de Felipe Bulnes y Joaquín Lavín.
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Los estudiantes defenderán que "el problema de la educación no es de carácter técnico, sino político", anunció el dirigente. (Foto: UPI) |
"El que tengamos al tercer ministro dentro del año demuestra un nivel de improvisación del Gobierno que a mí me parece impresentable", dijo Boric, cuyas críticas coinciden con la que expresó la vicepresidenta de la Federación, Camila Vallejo.
Lo anterior "demuestra que el Gobierno no tenía una política clara en materia de educación más que desactivar al movimiento estudiantil, cosa que no han logrado, y ahí el Gobierno tiene que hacer una profunda autocrítica", consideró el dirigente.
Boric advirtió que durante el próximo año, "frente a la entrada de Harald Beyer al Ministerio de Educación, vamos a tener una postura muy firme respecto de que el problema de la educación no es de carácter técnico, sino político".
Los desafíos del nuevo ministro
Según opinó José Joaquín Brunner, investigador del Centro de Políticas Comparadas de Educación, el mayor problema para Harald Beyer será "definir una agenda con prioridades claras -lo que hasta ahora el Gobierno no ha podido hacer- y en torno a esa agenda enfrentar luego las distintas coyunturas políticas, que habrá que ver si traen consigo más o menos movilización con distintos actores educacionales".
Por su parte, el coordinador nacional de Educación 2020, Mario Waissbluth, dijo esperar "que La Moneda le dé (al flamante secretario de Estado) el apoyo necesario en materia financiera, para poder construir un modelo que sea de consenso para la sociedad y (en el cual) no primen las visiones ultra neoliberales que ha tenido hasta ahora el Gobierno en esta materia".