El senador independiente y presidenciable radical, Alejandro Guillier, comentó sus diferencias con el comité político cuestionando, en particular, al ministro de Interior, Mario Fernández.
En alusión a la férrea defensa que realizó la Presidenta Michelle Bachelet a los ministros de La Moneda, Guillier manifestó que si bien a la Mandataria les tiene "mucho cariño", el problema es con "el equipo de ella" que lo ha hecho "tan bien, que no sólo quiere conducir este Gobierno sino también quieren definir la transición para el próximo. Están de abanderados del próximo (gobierno)".
"Ella (Bachelet) ha hecho un tremendo esfuerzo por sacar el Gobierno adelante, pero del equipo político (es) distante. Por ejemplo, de todos los cambios que se han hecho (...) a mí jamás me han preguntado si tengo una sugerencia de nada, nunca, entonces siento que no tengo vínculo con La Moneda", sostuvo.
El senador manifestó que "sólo cuando voy a hablar con la Presidenta me pescan, el resto del tiempo es tiempo perdido. Ahora, yo no sé si el ministro del Interior sufre de Alzheimer o es así, porque tú vas a hablar con él y al mes siguiente le dices: 'bueno ministro cómo nos' va y dice: 'Ah, ¿De qué conversamos? Ah, eso. Oye cuando yo estaba en el liceo en Rancagua'".
"Le he escuchado no sé cuántas veces la historia. Voy al tercer mes y sigue lo mismo; y cuando va el cuarto mes sigue lo mismo y el quinto mes. Entonces yo no sé si el caballero me está tomando el pelo o es así. Me dicen que es así, asi que me quedo tranquilo. No hay nada pendiente", acotó en una entrevista en a Radio Agricultura.
El fin de semana, la Presidenta Michelle Bachelet desdramatizó las críticas al comité político enfatizando que su equipo trabaja "extraordinariamente bien", enfatizando que es "serio, responsable que discute profundamente los temas y que trabaja muy unido".
Gobierno pide respeto
Tras los dichos de Guillier, la vocera de Gobierno, Paula Narváez, pidió respeto hacia el ministro del Interior afirmando que esas expresiones "no conducen a construir un país".
La nueva ministra remarcó que "el país entero necesita de sus autoridades un comportamiento que también tiene que ver con las palabras. Las faltas de respeto no conducen a construir un país".
Narváez añadió que "las palabras pueden ser ofensivas en varios sentidos, hay personas que efectivamente pueden tener la enfermedad y no corresponde sacarlas como ejemplo. No corresponde descalificar así a una autoridad política".
"Ofende más a quien las emite que al destinatario de ellas. Llamo a que tengamos respeto", enfatizó.