María Estela Ortiz también opinó sobre las propuestas de indulto.
"Es discriminar otros credos", dijo sobre la virgen que instaló su sucesora en el organismo.
La ex vicepresidenta ejecutiva de la Junta Nacional de Jardines Infantiles, María Estela Ortiz, salió al paso de las denuncias desde la Alianza sobre presuntas irregularidades cometidas durante su gestión.
"Este es un plan maquiavélico para destruir todo lo que hemos hecho y yo tenía claro el día que entre a trabajar a la Junji, que por mi historia, por no ser militante de la Concertación, por mi historia política, yo iba a ser una de las personas que me iban a mirar hasta debajo de la lengua, y lo tengo tan claro, que estoy tan tranquila", señaló a Una Nueva Mañana.
"Creo que el aporte que hicimos al país es enorme", dijo.
También abordó el hecho que su sucesora al frente de la Junji, Ximena Ossandón, instalase una estatua de la virgen a la entrada de las instalaciones del organismo.
"Creo que el Estado se separó hace bastante tiempo de la iglesia, creo que es discriminar a otros credos, a otros pensamientos y creo que no corresponde", sostuvo.
La viuda de José Miguel Parada también fue consultada sobre las propuestas de la Iglesia Católica y Evangélica e indicó "en el plano personal, creo que sería lamentable que a violadores a los derechos humanos se les diera el indulto".
"Me imagino que la cordura se impondrá y que el respeto a construir un país basado en la carta fundamental de derechos humanos sea lo que prime", recalcó.
