El arzobispo de Santiago de Chile, Ricardo Ezzati, declaró este miércoles ante la Justicia por una demanda de 201 millones de dólares contra el Arzobispado, al que acusan de apropiarse irregularmente del patrimonio del fallecido fundador de una conocida empresa de productos lácteos a través de una fundación.
La demanda fue presentada en 2013 por Ana Fernández Valdés, viuda de Juan Undurraga, fundador de la empresa Soprole, por unas presuntas triangulaciones irregulares entre la Fundación Isabel Aninat, que creó su esposo, y el Arzobispado.
Según los medios locales, Fernández busca una indemnización y la disolución de la fundación con el argumento de que ella no cuenta con la validación legal de la entidad porque fue creada como una institución de derecho canónico.
La demandante asegura que con las triangulaciones entre la fundación y el Arzobispado, la Iglesia acumuló un millonario patrimonio que le pertenece a la familia.
Fernández añadió que tras el fallecimiento de su esposo en 1990, la Iglesia se quedó con los bienes y realizó acciones irregularidades con la fundación, como donaciones y contratos de renta vitalicia simulados.
Tras la comparecencia, que se extendió por más de una hora, Ezzati se retiró sin realizar declaraciones a la prensa, mientras que el abogado del Arzobispado, Álvaro Ortúzar, sólo señaló que "fue todo muy sencillo, muy ordenado".