La Nunciatura Apostólica en Chile informó este viernes que el papa Francisco designó arzobispo titular de la Arquidiócesis de Santiago a Celestino Aós Braco, quien en marzo asumió como sucesor de Ricardo Ezzati, pero en calidad de "administrador apostólico sede vacante".
Según informó la Conferencia Episcopal, el papa también nombró arzobispo de la Arquidiócesis de Puerto Montt a Fernando Ramos Pérez, quien hasta ahora se desempeñaba como obispo auxiliar de la arquidiócesis de Santiago y administrador apostólico sede vacante de la Diócesis de Rancagua.
La Iglesia recordó que de las cinco arquidiócesis de Chile (Antofagasta, La Serena, Santiago, Concepción y Puerto Montt) eran las que encabezarán Aós y Ramos las que se mantenían como "sede vacante".
Permanecerán como tales, tras estos nombramientos, ocho "jurisdicciones eclesiásticas" en Chile: Copiapó (a cargo de un administrador diocesano), San Felipe, Rancagua, Valparaíso, Talca, Chillán, Valdivia y Osorno.
"Obispo encubridor y hombre malo"
La decisión papal fue criticada con fuerza por Juan Carlos Cruz, denunciante del caso Karadima, quien calificó a Ramos como "obispo encubridor, lacayo de cardenales Errázuriz y Ezzati" y "hombre comprobadamente malo".
"Premio por discriminar a las víctimas"
También hubo críticas de Jaime Concha, denunciante del caso maristas, quien atribuyó a Celestino Aós un "trato discriminatorio hacia las víctimas" de abusos y una política de "reparaciones selectivas". A Ramos lo trató de "delincuente".
Ramos: No soy encubridor de ningún delito
El ahora arzobispo de Santiago, Celestino Aós, sostuvo que "cuando hay un abuso, un exceso, un delito, es toda esa comunidad la que queda herida. Entonces, nosotros tendremos que ocuparnos de esos hermanos, y ocuparnos de otros hermanos también que están sufriendo por otros motivos a causa de la injusticia, de la mentira, etcétera".
Por su parte, Fernando Ramos se mostró sorprendido de la decisión tomada por el papa Francisco. "Estaba trabajando aquí en Rancagua con mucho entusiasmo, pero por otro lado también con mucho entusiasmo de poder ir a una nueva Arquidiósesis".
Además se refirió a los dichos de las víctimas y dijo que "no soy encubridor de ningún delito, menos de abusos sexuales, tampoco estoy muy enterado de este tipo de declaraciones".
