La Corte de Apelaciones de Santiago revocó la sentencia inicial para la Iglesia Católica chilena y la condenó por obstaculizar la investigación contra Fernando Karadima, fallando a favor de las víctimas de abuso del ex sacerdote.
La acción había sido rechazada previamente por el ministro en visita Juan Muñoz, pero este pasado jueves la Novena Sala de la Corte de Apelaciones evaluó nuevos antecedentes en la causa, entre ellos la carta del cardenal Francisco Javier Errázuriz al nuncio Giuseppe Pinto enviada en 2009, que dio un giro en la demanda contra el Arzobispado de Santiago.
En fallo unánime, los ministros Miguel Vásquez, Javier Moya y el abogado integrante Jaime Guerrero revocaron el fallo de Muñoz y así, aprobaron la demanda de indemnización impuesta por a James Hamilton, Juan Carlos Cruz y José Andrés Murillo, según informó La Tercera.
La institución deberá pagar 450 millones de pesos por concepto de daño moral a las víctimas, la mayor compensación económica en la que se ha visto comprometida hasta ahora.
El correo confidencial de 13 páginas de Errázuriz -que fue clave para el abogado Juan Pablo Hermosilla- fue hallado durante los allanamientos al Arzobispado de Santiago realizados en junio pasado por el fiscal regional de O'Higgins, Emiliano Arias.
La extensa carta, que se encontraba entre varios documentos de comunicaciones internas del clero chileno, detalla el carácter de las denuncias de abuso sexual contra Fernando Karadima.
Cabe recordar que la denuncia inicial de Hamilton, Cruz y Murillo realizada en 2010 fue sobreseída en primera instancia por prescripción de los delitos acusados.
Víctimas celebraron el fallo contra la Iglesia
Juan Carlos Cruz calificó de "histórico" el fallo, y como "el triunfo para tantos que han sufrido por sus crímenes" a través de su cuenta de Twitter.
"Iglesia pierde y se admite encubrimiento, negligencia y mentiras. Desde hoy un mundo más seguro para niños. Cardenales Errázuriz, Ezzati y su banda de obispos expuestos como lo que son... ¡Unos delincuentes!", subrayó el demandante.
Se le unieron José Andrés Murillo y James Hamilton, que en mensajes más escuetos en la misma red social se mostraron conformes con el dictamen de la Corte.
"Hoy está más crujiente la marraqueta" señaló Murillo, mientras que Hamilton se limitó a aseverar que el "encubrimiento = crimen".
Se estima que en los próximos días salga la resolución final en la causa, aunque es posible que la defensa de la Iglesia interponga una acción civil en la Corte Suprema para revertirla.
