Marcial Sánchez, experto en la historia de la Iglesia Católica en Chile, conversó este sábado con Cooperativa sobre la situación del cardenal Francisco Javier Errázuriz, sindicado como encubridor por víctimas de abuso, y aseguró que éste será forzado a dar un paso al costado, ya que "el papa no quiere tener a su lado a gente que esté involucrada en temas de abuso".
"Las víctimas están apuntando a Errázuriz de todo lo que les sucedió. Si uno revisa su historia, él fue quien recibió las primeras denuncias el 2003, y recién el 2007 hace verosimilitud de uno de ellos y lo lleva al Vaticano, lo que fue bastante tarde", recordó Sánchez en El Diario de Cooperativa.
"Durante todos esos años, el abusador Karadima seguía haciendo de las suyas en El Bosque y creo que es un problema de conciencia bastante grande que debe tener el cardenal Errázuriz", agregó
"Con todos estos antecedentes que reunieron (los enviados Jordi) Bertomeu y (Charles) Scicluna, puede que se le pida a Errázuriz dé un paso al costado y lo puedo decir con bastante certeza, creo que eso va a suceder y tiene que suceder", dijo Sánchez respecto a las versiones de prensa que indican que el papa lo removerá del denominado "C9", su grupo cercano de asesores para la reforma de la curia.
"El papa Francisco lo que no quiere es tener a su lado a gente que esté involucrada en temas de abuso, tema con el que ha luchado durante todo su pontificado. Por eso dice que 'recen por él'; es una lucha interna y externa muy dura. (...) Yo creo que estamos ad portas que decisiones de importantes decisiones del Vaticano y de la Justicia Chilena", sostuvo el doctor en historia.
"El papa no quiere equivocarse" de nuevo con Chile
Además, Tagle se refirió a la situación del cardenal Ricardo Ezzati, quien el martes deberá declarar como imputado por el encubrimiento de los casos de abusos en la Iglesia, y quien recientemente se restó del Te Deum Ecuménico, en medio de públicas presiones para que lo hiciera.
"El cardenal está renunciado hace un par de años y desde ahí ha pedido ser removido de su cargo, decisión que no ha sido tomada por el papa. Pero, con los últimos antecedentes recabados y luego de que los denunciantes del caso Karadima lo han tildado de encubridor, es obvio que el cardenal Ezzati se ha visto deslegitimado frente a la opinión pública", dijo.
"Ante esto, lo único que espera uno es que el papa provoque un cambio en esta plaza de Santiago. El papa se ha demorado por la persona que tiene que colocar debido al grupo de obispos que tenemos, que son muy cuestionados, que están siendo investigados, que fueron formados por Karadima, por lo que no hay muchos candidatos", aseguró.
"El papa no quiere equivocarse. Ya se equivocó lamentablemente con el obispo Barros y ahora no quiere equivocarse, debido a la importancia de la Iglesia Chilena a nivel Latinoamericano", finalizó Sánchez.