Después de la expulsión del sacerdocio del ex cardenal y arzobispo emérito de Washington, Theodore McCarrick, los laicos de Santiago esperan un gesto similar contra religiosos chilenos denunciados por abusos sexuales.
Osvaldo Aravena, vocero de dicha organización, valoró que el papa Francisco reconociera el término del caso contra el McCarrick, y espera que un escenario semejante también se dé en el país.
"Esperamos que en Chile se repitan situaciones similares con obispos y sacerdotes, que más allá de que hayan cumplido muchos años de vida, y de que inclusive algunos delitos estén prescritos, sean públicamente tratados sus casos, que se sepa quiénes fueron los que abusaron de niños y jóvenes", precisó.
Sin embargo, Aravena dice que mantienen "los pies en la tierra" considerando el clima de tensión que debe persistir en el Vaticano, pero este no deja de ser "un gesto esperanzador" ante el próximo encuentro sobre protección de menores, a realizarse desde el jueves 21 de febrero en Roma.
Este cónclave se extenderá hasta el próximo domingo 24, y se espera que el papa junto a al menos 170 líderes religiosos y otros sacerdotes aborden este tema y escuchen testimonios de víctimas.
El historiador y experto en Iglesia, Marcial Sánchez, enfatizó que la expulsión de McCarrick "es una muestra de fuerza" previo a esta reunión, además de ser "una decisión absolutamente histórica en la historia reciente de la Iglesia Católica".
"Es un fuerte golpe que hoy día pega Francisco sobre la mesa con respecto al tema de los abusos de menores. Con esto no cabe duda de que está planteando que ya nadie es intocable, nadie puede estar por sobre lo que realmente significa ser católico en el mundo de hoy", explicó.