Durante la mañana de este sábado el arzobispo de Santiago, Ricardo Ezzati, celebró una misa de Navidad con 230 internas, algunas con sus hijos, del Centro Penitenciario Femenino de San Joaquín.
"Todos los años en vísperas de Navidad he venido a celebrar la eucaristía en este lugar, anunciando la buena nueva justamente a quienes la necesitan", señaló el cardenal.
"La buena nueva es que tenemos un redentor que viene a salvarnos a todos, los que están en un recinto penitenciario y también a los que están afuera, que también necesitamos de la redención del Señor", agregó Ezzati.
El cardenal además aprovechó de enviarle un mensaje a los poderosos: "Hay personas que no quieren abrir el corazón a Jesús para recibir su gracia, su amor, su fiel lealtad para con nosotros. Hay también en el día de hoy poderosos que creen en el dios dinero, que creen en el dios poder, que creen en el dios de influencias sociales y políticas, y que se creen los salvadores del mundo".
En la misa, que se extendió durante una hora y media, también participaron autoridades de Gobierno, como el subsecretario de Justicia, Nicolás Mena, y el presidente del Consejo de Defensa del Estado, Juan Ignacio Piña.
