La Fiscalía Metropolitana Sur estableció la existencia de 28 víctimas de delitos sexuales al interior de la congregación católica de los Hermanos Maristas, en hecho ocurridos entre 1970 y 2004 y en que tuvieron participación 17 religiosos de la orden.
Además, vinculados a esta investigación, se determinó la participación de otros dos sacerdotes diocesanos, agregó el organismo persecutor.
Estos antecedentes fueron informados por el fiscal regional, Héctor Barros, y la fiscal jefa de Delitos Sexuales, Yazmín Salech, a víctimas y querellantes de estos casos en una reunión telemática sostenida esta jornada.
Durante la indagatoria, los persecutores recabaron más de 150 testimonios, entre víctimas, testigos e imputados, diligencias realizadas directamente como Fiscalía Sur o a través de las ordenes de investigar e instrucciones particulares a la Brigada Investigadora de Delitos Sexuales de la Policía de Investigaciones.
También hubo allanamientos a dependencias vinculadas a los Hermanos Maristas.
"En estos hechos se vulneró gravemente la indemnidad y la libertad sexual de estas personas, aprovechando su vulnerabilidad de niños, niñas y adolescentes y el dominio que los imputados ejercían en ese momento sobre ellas y ellos, desde el punto de vista religioso, social o educativo, entre otros factores", expuso la Fiscalía.
En las investigaciones se estableció que las víctimas tenían entre 7 y 25 años al momento de ocurridos los delitos sexuales en su contra.
Dado que los hechos se registraron con anterioridad al inicio de la Reforma Procesal Penal en la Región Metropolitana, por ley, los casos deben remitirse a la antigua justicia criminal, que según los antecedentes reunidos, es la que tiene la competencia penal.
En ese sentido, la audiencia de competencia de la causa se realizará este viernes 28 de mayo a las 11:00 horas en el 15° Juzgado de Garantía de Santiago.
"ALICIENTE DE QUE SE LLEGARÁ A LA VERDAD"
Mediante una declaración pública, la Congregación Marista sostuvo que "desde 2017 ha denunciado una a una al Ministerio Público todas las acusaciones de abuso solicitando que se investigara con diligencia para aclarar cada caso", mientras que, "en paralelo, fue escuchando a cada víctima, recogiendo sus relatos y brindándoles orientación legal y todo el apoyo espiritual y psicológico que han necesitado y que la mayoría de ellos aceptó y ha estado recibiendo".
"En consecuencia, recibir esta noticia -después de casi cuatro años- es un aliciente y una esperanza de que se llegará a la verdad y se hará justicia, algo más que necesario y un anhelo acuciante para cada una de las personas abusadas", subrayó.
Aquello, pese a que, "naturalmente, hubiésemos querido que la Fiscalía no se demorara cuatro años en concluir que carecía de competencia para investigar en estos casos y que recién ahora sean remitidos a los tribunales de la antigua justicia del crimen".
De todos modos, "lo positivo es que se avanza, porque la espera ha sido demasiada y es hora de hacer justicia".
De hecho, remarcó la orden religiosa, "en forma independiente, la Congregación Marista ha estado trabajando en los últimos meses con asesores externos y laicos -expertos en derechos humanos y situaciones de abuso- para buscar alternativas de reparación para quienes sufrieron estas vejaciones".
"Sabemos que ninguna forma de reparación será suficiente ni logrará borrar el sufrimiento vivido y que aún hoy padecen, pero estamos confiados de que llevará algo de tranquilidad y esperanza a quienes fueron -y siguen siendo- maristas y a sus familias", manifestó.
"El Sector Marista Chile seguirá colaborando irrestrictamente con la justicia, tal como lo ha hecho hasta ahora y ante cualquier tribunal del país", concluyó.